The Summit

Dentro del selecto grupo de films que se gana el respeto de los montañistas y tomando distancia de Hollywood, "The summit" (2012) es reconocida como una cinta que mezcla recreaciones y registros inéditos en una historia verídica que gana en credibilidad y valiosos testimonios, pero evita adjetivaciones o juicios sobre un episodio que da para múltiples lecturas.

Esos relatos de vida así como las secuencias del macizo más peligroso del mundo, consiguen lo que una película de acción o aventuras no podría: hacer sentir la ventisca de los Himalayas, conocer mucho de la técnica, los accesorios, la terminología, dándose maña de insertar varias historias en torno al temido K2.

En este sentido se aprende bastante para quienes no somos especialistas en muchos de los aspectos del montañismo, y de paso, se da un interesante vistazo documental a la tragedia, a sus protagonistas y los vacíos en una historia que pese a la modernidad y sus adelantos, sigue en la nebulosa.

En medio de los flancos que se presentan, "The summit" es bastante más que correcta y sobria, y aunque no destelle, no extraña que haya llamado la atención de Sundance y sea bien comentada por los escaladores, pues maneja bien los elementos de realidad y sentido documental.

Limitando tomar una postura de forma muy explícita pero generando una clara tendencia editorial, la desafortunada expedición de 2008 llega a públicos más masivos con esta cinta, que tal como se testimonia, suelen hacer más noticia y trascender en los desastres que en los éxitos mismos en la cumbre.

Recomendación:
Buena. Sobria. Digna de respeto por su credibilidad y extraordinaria fotografía.

=Cité de Lord Buyinski= www.buyinski.wordpress.com

Mas allá del documental y de su estilo (a mi me ha gustado que no sea lineal), me parece que estamos ante una historia que es algo mas que una tragedia: es una experiencia para aprender. Aprender de errores. Y eso si lo refleja bien este documental.


El documental transmite perfectamente esta energia casi religiosa, que a veces da la sensacion que es una especie de ego enorme que tienen muchos escaladores. Un ego bien domado a veces eso si, un ego que se contrapone a mil elementos comunes. A la mala suerte también como es en muchos de estos casos trágicos.

Pero me gusta del documental que quede bien claro este tipo de elementos egoicos, porque por desgracia cada vez mas nos encontramos en la montaña actitudes infantiles - en los últimos años los rescates en alta montana se han doblado.

Así que este tipo de documentos son muy importantes, viendo la de gente inconsciente e irresponsable que se pasea como si fuera el paseo marítimo. Y es que hay momentos épicos en este documental (caso del Serbio, caso del Coreano) donde queda claro que muchas expediciones -y perfiles- no van preparadas y solo van a por el éxito. Y esto queda bien retratado y hay que ser valiente también para contarlo. A parte ya hoy en dia sabemos que hay colas en el Everest así que otro documental así no sobra.De hecho todos tenemos algo que aprender en lo que a montañismo se refiere.


Evidentemente no esta cien por cien esclarecido lo que sucedió en la algunos momentos, pero lo han intentado de una manera estricta y bien recreada, y se da voz a todos los protagonistas vivos (excepto uno que no quiso hablar). Y a los protagonistas que fallecieron tienen voz de sus familiares. Buen trabajo de producción si señor.

A parte son entrevistas cercanas, dan tiempo, se toman su tiempo , como debe ser en la montaña. Se agradece en un mundo televisivo donde todo son prisas.

El documental sobre el papel es muy atractivo, porque la muerte siempre lo fue, lo es y lo será, además si se le une escaladores sufridores en pos de alcanzar la cima del K2, pues es sinónimo de atención primaría.

Pero no todo es bueno, y tiene fallos, el primero y más importante es el hilo conductor, no se centra en la tragedia de cada uno de los muertos, si no es un homenaje póstumo al primer irlandés en pisar la cima, donde se nos muestra como el tipo más genial del mundo, una mezcla entre Motos y Teresa de Calcuta, un ser único (pero quién no lo es, cada uno de nosotros somos peculiares, y todas las personas muertas que he conocido, siempre las recuerdo por su buenos actos y no los malvados, y ¿ustedes?). Falta chicha. Carece del dramatismo general, porqué no murió una persona, si no 11 seres humanos, y entre ellos un par que fueron obligados alcanzar a San Pedro, donde por supuesto hubo fallos, pero lo más penoso es de trasfondo deja claro, que el escalador es sinónimo de egocentrismo ante una meta, un sueño, pero qué harían ustedes, ¿dejarían morir a un desconocido o alcanzarían su sueño, un sueño valorado en más de diez años de sufrimiento y entrenamiento y de más de 50.000 euros?

El segundo fallo es el montaje, en vez de ser lineal, como toda tragedia humana, para que la historia sea clara, manteniendo en todo lo posible la realidad y no intentar llevarnos al terreno del subjetivismo, dejando conclusiones personales, para el final, pero en este documental va dejando de lado el objetivismo a la vez que pierde esa linealidad argumental, con saltos innecesarios en la historia, que lo único que consigue es liar, sobre todo a medio documental, donde parece un pequeño lago argumental para ampliar la longitud del documental.

El tercer fallo, es la historia del italiano de los años 50 que no coronó pero fue artífice para la coronación por primera vez del K2 por parte de su compañero, y su tragedia personal durante estos últimos 50 años, no tiene cabida, sobra, eso es para otro documental. La historia es buena, pero ese debía haber sido el punto de origen del documental, pero nunca una historia paralela.

¿Entonces cómo es que le doy tan buena nota? Pues porqué nos ofrece buenas imágenes, grabadas en primera mano por los escaladores, y vemos la grandiosidad del K2, junto a buenos comentarios de los protagonistas, entre ellos la de un español solitario, y para rematar, para acercarnos a la historia han recreado escenas con actores, y eso siempre se agradece, ya que la vista, por desgracia, come más que las palabras. Pero sobre todo, y como dije al principio, la muerte fue, es y será siempre atractiva.

Disfrútenlo, sólo por ver la grandiosidad de la montaña ante el afán de aventura del ser humano, algo que poco a poco, a día de hoy, se está perdiendo, la aventura de vivir, aunque en un futuro espero un mejor documental sobre esa tragedia, ya que se han omitido muchos datos, y por supuesto, no ha sido nada objetivo e incluso hay datos que se han sacado de la manga.

Me parece genial que quieran limpiar el nombre de un escalador o que se quiera contar la historia de lo que no se debe hacer en la montaña, pero yo juzgo esto como película. Y como tal, me aburrí y no volvería a verla. No sé quién le dio ese premio al mejor montaje, pero no me imagino cómo sería el peor. Los flashbacks hacen la historia aún más confusa de lo que es. La mayor gracia es la posibilidad de ver el K2 tan de cerca. Sobre la sinopsis de filmaffinity: se dice "veinticuatro" y no *veinte y cuatro. Vergüenza debería darnos que una página tan visitada no tenga gente trabajando que al menos sepa escribir correctamente. Por favor REVISE su sinopsis antes de subirla. NO SE ACEPTARÁN SINOPSIS CON FALTAS DE ORTOGRAFÍA (LO QUE VOSOTROS LLAMÁIS "ACENTOS" SON EN REALIDAD "TILDES", Y YA ESTÁN INCLUIDAS EN LAS FALTAS DE ORTOGRAFÍA). Patético. Os ofrezco mis servicios de nuevo, que no se diga que no intento mejorar las cosas.