Era una tarde de verano del 20XX, estaba sólo en la casa de mi padre, hacía años que no tenía tiempo libre y decidí ir a ver al viejo, en uno de esos sentimientos necesarios de reunirse con la familia lejana, pero resulta que cuando llega ese día que quieres convivir con la familia o con cualquier familiar y piensas que tienes las vacaciones perfectas, el universo teje esas redes misteriosas que hacen que nada salga como estaba planeado, ni el viajar 1500 kilómetros, ni el planear un día de playa, ni el saludar a los amigos de la infancia, nada, en vez de eso terminas rebuscando entre los estantes de las películas familiares y libreros para ver si hay algo que pueda ayudarte a pasar el rato en lo que llegan los demás, porque has olvidado considerar que todos tienen que trabajar o ir a la escuela, en horarios tan dispares que ya no tienes idea de cómo has ido a parar a ese lugar.

Pues bien, en esa revisión casi obligada me tope con una caja negra, polvorienta y olvidada debajo de unos libros, detrás de un montón de discos compactos, cintas de audio viejas y libros olvidados, no había leyenda en la portada por lo que podía ser cualquier cosa… Pero ¿Qué clase de CD o DVD era que merecía estar en ese sitio?, ¿Porno?, ¡Imposible!, niños en casa, ¿Música satánica? ¡Jamás!, recién se habían convertido… me atreví abrir la caja y… no entendí que hacia una película del tipo de la gran “S” alejada del mundo.

En su tiempo de estreno estaba en la universidad por lo que me fue imposible ir a verla, me habían dicho que Kevin Spacey había hecho un buen Lex lutor , pero viniendo de compañeros de carrera que estaban igual o peor que yo de desconectados del mundo, me fue de poca ayuda tan limitada referencia que decidí verla con mi propios ojos.

Si he hecho una introducción tan larga es porque no hay otra forma de llenar por lo menos los dos primeros párrafos de una crítica hacia esta película sin comentar lo pésima que es, con un guión repleto de agujeros y actores que dan tanta pena que dan ganas de tomar la cinta y enterrarla en lo mas profundo del desierto, o por lo menos hacerlo simbólicamente como ya lo había hecho la persona que vio la cinta antes que yo.

Me ha sorprendido enormemente Nicholson, por su actuación más que por el papel que desempeña y que decir de Freeman, pensaba que sólo la hacia de detective o jefe de la policía, pero me ha dejado asombrado por su interpretación de un mecánico muy inteligente, es decir, estaba actuando de persona normal... y se la creí.
Los que hayan visto el episodio "Aviso de Muerte" de los simpsons se les harán familiares algunas escenas, igualmente cargadas de humor que de un poco de drama, pero que juntos hacen una deliciosa mezcla que vale la pena probar sin el riesgo de sufrir un envenenamiento.
He pasado una de las mejores tardes de mi vida en un cine, frente a esta cinta muy entretenida como comedia y muy ligera como drama, pero altamente recomendable si estas harto de ver efectos especiales, explosiones, persecuciones y ciencia ficción.
Recomiendo que le den una oportunidad a Nicholson y Freeman ya que quizá sea la última vez que los veamos juntos, y si hasta que sales de la sala y llegas a casa es cuando te acuerdas que ambos personajes participaron en batman... pues así de buena es su actuación.

Al grano, si piensas en cualquier cliché de cualquier película de ciencia ficción que involucre extraterrestres y zombis, lo han incluido en esta cinta.

Esta cinta no pretende ni por asomo el competir con ciertos genios de la animación a ningún nivel, pues a pesar de que la animación es más que excelente, no lo es el diseño de personajes, y desde ahí todo se desborona. Pues una excelente animación no basta para sostener un guión basado en clichés y estereotipos hasta la saciedad, que pasan por la típica familia americana, el niño increíblemente detestable, el obsesivo coleccionista de comics, la chica vecina, el general necio, el experto estúpido, el chico de buenos sentimientos, el hippie, el ligón, el perrito consentido y hasta el cartero maldoso. Tenemos pues una colección de personajes nada llamativos y planos por completo, que se mueven en un mundo de tres dimensiones “MAGNÍFICO”.

Pero eso es bueno, indica que las cosas están empezando a cambiar fuera de las fronteras americanas y por fin están tomando elementos que desde hace mucho no habían sido considerados en el cine de animación, para empezar se están dando cuenta que una cinta de animación “NO ES UN DIBUJO ANIMADO”, ambos tienen diferentes fortalezas y debilidades, lo que puedes mostrar en una no se ve igual de bien en otra, un personaje creado en tres dimensiones prácticamente existe en su propio mundo real y es capaz de hacer cualquier cosa, pero dentro de las limitaciones que implican el “existir” de forma virtual, mientras que un dibujo animado tiene esa libertad de movimiento y exageración absoluta que lo caracteriza y que permite hacer vertientes creativas distintas, y no solo eso, también son formas diferentes de hacer cine, por desgracia muchos lo siguen viendo como sinónimos cuando están a un abismo de diferencia.

Compañeros “dibujos animados” y “animación 3D”no son lo mismo, puede que se coman igual pero se saborean diferente, tan diferente de cómo he disfrutado esta cinta y de de no ser porque era una “animación 3D” recibió seis estrellas en mi muy humilde opinión y no sólo una si hubiese sido hecha como dibujo animado.

Antes que nada una disculpa para quien se sienta ofendido pero la sensación que se apoderó de mi desde los primeros minutos al ver esta cinta fue la misma que sentí cuando vi por primera vez “Plan 9 del espacio exterior” y es que ¡Seamos francos!, esta película trata de copiarla en descarado. Y al igual que en plan 9, a los diez minutos dejas de buscarle errores para empezar a disfrutar de la cinta, en menos de tres minutos sabes que estás viendo una broma, y el desarrollo de la misma hace que se acentúe esa sensación.
En ninguna otra película desde la obra cumbre de Ed he visto que convivan tanta… ¿Trama? ¿Personajes?... no lo sé, pero me supongo que la mayoría no intencionado… o que director en su sano juicio metería en la misma cinta: Profecías mayas, Mayas, Pirámides habitadas por extraterrestres, otra raza de extraterrestres, zombis, niños poseídos, abducciones, momificaciones, bacterias gigantes, cazadores que pueden disparar una bala rastreadora a un ovni, noche que se hace día, actores que imaginan están haciendo el papel de sus vidas, tomas trucadas sin imaginación (como que intentan hacer creer que van caminando y solo se mueven en vaivén), elegidos, el fin del mundo… y un gran etcétera… pues sólo en Plan 9 y en “Seres-Génesis” y como tal, es tan mala pero tan mala... que es buena.

En algún punto de mi vida he tenido que pasar frente al basurero municipal, o por lo menos ir detrás del camión de la basura en alguna calle muy pequeña o en la carretera, y supongo que la mayoría conoce esa sensación, cuando tratas de rebasar ese camión y no hay espacio en la carretera. Pues bueno, ese recuerdo ha llegado a mi cabeza apenas a los 10 minutos de iniciada la película, y es que me atreví, luego de leer por ahí que se encuentra entre las más divertidas, que no tiene pretensiones y que pasaría un buen rato.

Pero lo que he visto desfilar ante mis ojos es una pieza de basura pura, no tengo otras palabras para calificar a un completo montón de despropósitos intelectuales del estereotipado “American Style”. ¿Abogados?... ¡Qué original!. Una rubia con un chihuahua de mascota… ¡Qué original!. Amigos de fraternidad… ¡Qué original!, en fin, que sólo le faltaba un detalle para ser más original, que estuviese ambientada en Harvard... y sí, está ambientada en Harvard.

Pero en definitiva la frase que casi hace sangrar mis oídos fue: ¿Cómo crees que me vería de rubio?... No creo que puedas con eso.

No puedo terminar de escribir este intento de crítica sin preguntarme si algún día harán alguna película sobre un tema más complejo, como, Ingeniería, Biología, Medicina, u otra ciencia sin tratar al espectador como un idiota.

No puedo creer que sea basada en un libro, en serio que no lo creo, pero bueno peores cosas han salido de la adaptación al cine de diversas obras.