La última entrega de la saga Star Wars es la mejor de la trilogía final. Dos horas y media de emocionante espectáculo con un guion repleto de acción en el que no paran de suceder cosas a un ritmo vertiginoso. La vuelta de J.J. Abrams a las labores de guion y dirección se nota y para bien. Después del estropicio perpetrado por Rian Joinhson en la anterior entrega, los fans estaban muy decepcionados y al mismo tiempo esperanzados con que Abrams retomará las riendas del proyecto y las aguas volvieran a su cauce. El resultado me ha convencido y reconozco que es un buen final para la historia de Star Wars pero hay un problema grande.

Y es que después de nueve películas, sin contar los dos spin offs de Rogue One y Han Solo, viendo prácticamente lo mismo la cosa aburre. Siento indiferencia por los destinos de unos protagonistas que se esfuerzan y están interpretados por buenos actores pero que no tienen el carisma de sus predecesores. Todo resulta cansino y avasallador, de ahí que aunque reconozca que se trate de un espectáculo de primera impecablemente realizado, me aburro bastante porque no deja de ser más de los mismo al cubo. Han matado a la gallina de los huevos de oro.

Decepcionante superproducción catastrofista que tuvo un relativo éxito de taquilla a pesar de la mega campaña de publicidad y marketing que se orquestó para promocionarla. La historia supone un cruce entre King Kong y Parque Jurásico pero filmada sin gracia y escasa imaginación, con aluvión de efectos visuales para tratar de compensar sus carencias aunque actualmente se los ve un tanto anticuados.

Otro fallo es el del casting, el reparto está muy descompensado. Entiendo la intención de los productores de no contratar a una gran estrella para centrar el protagonismo en la criatura y de paso ahorrarte una pasta pero a Matthew Broderick le queda grande el papel. Puede que cuando era un veinteañero en los ochenta tuviese cierto carisma juvenil pero con la edad toda esa gracia la ha perdido y su trabajo resulta bastante discreto. Jean Reno es un gran actor pero su personaje no encaja en esta historia. Tampoco Kevin Dunn me convence, no le veo como duro militar. Respecto a Maria Pitillo, fue nominada a los razzies así que con eso queda todo dicho.

El guion falla también con diálogos poco ingeniosos y repleto de tópicos.

Después de diez años de aventuras de La patrulla X se estrenó este spin off que narra los orígenes de Lobezno y la conexión con el resto de los miembros de la famosa patrulla. Un personaje tan carismático como el de Lobezno tenía que tener su propia película.

La historia se centra en el enfrentamiento entre dos hermanos lobeznos, Jackman y Schreider, quienes crecen juntos a lo largo de siglo y medio para después acabar enfrentados cuando Schreider empieza a comportarse como una verdadera bestia.

Buen ritmo, espectaculares efectos visuales y mucha acción para un film entretenido que no está por debajo de sus agarrotadas predecesoras, más bien al contrario.

Interesante intriga judicial potenciada por su atractivo reparto que sin embargo se ve lastrada por su confuso final.

El duelo entre Freeman y Hackman se salda en tablas. Mónica Bellucci está impresionante en todos los sentidos.

Lo que parecía un simple trámite burocrático entre dos colegas se transforma en un duro interrogatorio en el que su protagonista acaba convirtiéndose en el principal acusado del asesinato de dos adolescentes.

Hay muchas películas que hablan sobre la labor del periodista de investigación en busca de la verdad remarcando la importancia del periodismo serio y riguroso. Con El gran carnaval pasa lo contrario. Se trata de una obra agridulce que retrata magistralmente las miserias humanas en una historia tan cruel como real. Todos los defectos del ser humano quedan expuestos; el morbo, el afán desmedido de lucro, la ambición política, la mentira, el egoísmo y sobre todo la falta de escrúpulos del periodismo sensacionalista y el beneficio económico a cualquier precio.

Y es que cuando comprendamos que no todo en la vida se reduce al dinero mejor nos irá. Como bien decían los de Eskorbuto "La mentira es la que manda, la que causa sensación, la verdad es aburrida, ¡Puta frustración!". Una cita que a esta película le viene como anillo al dedo.