Sí, sí que lo es, que no os engañen. Incluso es aun más estúpida. Mucho más.

De un humor grueso que por momentos bordea el mal gusto escatológico-pornográfico, lo que pretende ser una simpática parodia de todos los clichés de las cintas de consumo rápido dirigidas al publico adolescente que tan de moda están en la actualidad y que invaden las carteleras de nuestro país de continuo, no es más que un producto precocinado, de gracias a cual más penosas y sonrojantes y cuyo potencial humorístico parece resumirse en ser más vulgar, desagradable e idiota que los films objetivos de burla.
Y es que tan desastrosa que incluso resulta previsible…

Ni pizca de ingenio ni sutileza, todo es desmedido y grosero en este aborto fílmico que pretende ironizar y lo único que consigue es dar vergüenza ajena.