Si con Jacuzzi al pasado, cinta que vi hace unos días sencillamente porque quería ver las dos de un tirón, nos encontrábamos con una película entretenida, aceptable y a ratos divertida que se valía de guiños y homenajes a los 80, en esta se explota el éxito repitiendo prácticamente fórmula solo que esta vez sin John Cusack y con menos humor.
Lo que mejor funcionaba en la anterior eran Craig Robinson y Rob Corddry y en esta resultan cansinos y repetitivos, su humor extremadamente obsceno resulta típico y excesivo. Aunque hay un par de momentos graciosos y las referencias al cine de viajes en el tiempo me hicieron gracia, no deja de ser una secuela prescindible y nefasta debido a su pobre guión que resulta forzado y cogido con pinza lleno de Deus ex machina. No hay actuaciones que se salven y se nota una película que aunque tenga el mismo director que la anterior está poco trabajada y eso que han tenido 5 años para mejorar algo que en su primera entrega era mejorable, el guión, las ideas no están mal porque el tema de viajes en el tiempo siempre se le puede sacar jugo pero aquí no lo explotan, aquí lo sobrepasan y acaba empalagando. Entretiene pero no se salva de la quema.