Hasta la primera mitad, la película llama la atención. En una casa se cometen varios homicidios, y encuentran un cuerpo que no encaja. Entonces lo llevan a que le hagan la autopsia, y los especialistas van encontrando cosas extrañas. En este punto, me esperaba una explicación científica que condujese a explicar los homicidios y que cerrase la peli.

Desgraciadamente, aquí se produce un punto de inflexión donde se recurre al esoterismo y a los fantasmas para continuar la historia. A partir de ahí, pueden inventar lo que quieran, y la peli pierde interés.

A destacar las tetazas de Olwen Catherine Kelly haciendo de muerta. No dice ni una sola frase. Eso sí, la han maquillado que la chica, ya de por sí guapa, incluso sale ganando.