Sorpresa. No estamos acostumbrados a recibir trabajos cinematográficos nacionales de corte épico con tal grado de calidad técnica, y mucho menos ahondando en temas prácticamente desconocidos para el gran público, este título es uno de esos ejemplos, equilibrando la narración con una interpretaciones más que solventes, apoyando su trabajo en un guión férreo y destacando en su parte técnica, una brillante fotografía, magnífica y elegante (solo por este motivo merece la pena su visionado), un más que acertado sonido y por supuesto su sobrio montaje, se presenta en conjunto un trabajo más que digno, acercándonos a la épica de otras grandes superproducciones, sin perder la linea de realismo y veracidad.

Es en las historias de derrota cuando el ser humano muestra su cara real, su interior más profundo, mostrando todas las realidades de aquel escuadrón abandonado a su suerte, por una lado aquel mando, con convicción y honor que les hacía luchar, tomando la adversidad como una parte del paisaje, por otra los sentimientos de los muchos soldados jóvenes e inexpertos que mandaron a aquella misión, hoy considerada suicida, en busca de un éxito imposible, el paralelismo con aquella expedición en busca de "El Dorado" se hace inevitable y es que el ocaso de Imperio Español está repleto de historias épicas en la derrota y de ejemplos de valor en su locura, Si.

Es en definitiva, una película que se deja ver con interés, con una duración que no se excede en su propósito lo que hace mantener al espectador inmerso continuamente en la historia, es sin duda un buen ejemplo de trabajo de su director, contando con pasión y precisión quirúrgica una historia, que, corriendo los tiempos que corren, nos viene bien para recordar, quienes somos y de donde venimos, con nuestros triunfos y derrotas y darnos, al menos algunas pinceladas de nuestro devenir más reciente, y es que, un siglo atrás, en la historia de un gran país, no queda tan lejos. MUY RECOMENDABLE, seguro sorprenderá a más de uno.