Ésta es una de esas pelis que ves en bucle, que no te cansan, ya te sabes los diálogos pero te sigues riendo con los chistes malos, incluso sigues disfrutando de las "míticas escenas" del film. Es una mezcla de géneros de terror, alienígenas, Slasher, comedia, como un todo mezclado en una loca orgía de lo absurdo. Siento decirlo, y sonará fatal, pero ya no se hacen buenas pelis de este género que enganchen así. La BSO es magistral, como en esos años en general y para este género en particular, la música en el cine todavía era buena, tenemos "The offspring", "Garbage", "Oasis" y muchos más. Es genial el comienzo y el final. No sólo ayuda la música, los actores son de primera. El buenazo pero no tonto Elijah Wood, el chico malo, el gran Hartnett, que vende drogas, este chico, ya hombre, que no me cansa nunca. La "zorra", la "mítica", buenas notas, guapa e insoportable, interpretada por Jordana Brewster, la gran Clea Duvall, haciendo de chica friki de la ciencia ficción pero al mismo tiempo de gótica (extraña mezcla que sólo se le podía ocurrir a Rodriguez) y Shawn Hatosy como el típico capitán del equipo del insti al que aprueban porque juega bien (Pero él quiere cambiar, esto también es genial), y por otro lado tenemos a los profesores, que también son un cliché en las películas de los 90'. El profesor de gimnasia al que se le va la olla, la enfermera sexy, el bobito de biología que quiere ligar con la enfermera sexy. y al final nos queda la buena de las buenas o la mala de las malas, el verdadero monstruo, como siempre, en la originalidad de Rodríguez resulta que el monstruo es una rubia de cuerpo perfecto que su planeta se ha secado y que necesita procrear. Todo en conjunto hacen un film para ver en repetidas ocasiones, porque no te cansas de los protagonistas, o de la música, o de los planazos y por supuesto del humor negro que hay durante toda la peli.

Me saco los ojos cada vez que veo la escena de la ducha, esa pobre profesora de 100 años que se va deshaciendo en manos del medio desnudo capitán del equipo de fútbol. Brutal. No tengo palabras.

Sigo insistiendo en la BSO.