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Voto de Turbolover1984:
7
Drama Sandra dispone sólo de un fin de semana para ir a ver a sus colegas y convencerlos de que renuncien a su paga extraordinaria para que ella pueda conservar su trabajo. Su marido la acompaña para apoyarla. (FILMAFFINITY)
17 de febrero de 2015
1 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Cada vez son más los casos de trastornos o problemas asociados a la salud mental o quizá con más vías de comunicación y canales para expresarse (véase redes sociales) parecen mayores o más presentes. Antes el supuesto crecimiento se achacaba a una sociedad trabajadora y exigente que no dejaba tiempo ni margen de error, ahora a la falta de trabajo, de recursos. Entre eso y cada vez más falta de autoestima, los casos de ansiedad y depresión parecen ir a más. Aunque esta siempre ha estado presente y con los años se convirtió más en un estado que una enfermedad, el "estar deprimido" trasladado al estar "de bajón" por algo puntual. La muerte de un ser querido, un cambio brusto en la vida a peor...o simplemente que alguna de las conexiones eléctricas del cerebro de repente le daba por decir basta y cambiar el estado de ánimo. Sin menospreciar la complejidad del cerebro humano, quizá este caso es el que se me haga más difícil de entender. Gente que tiene trabajo, familia que la quiere, incluyendo un esposo que la venera y unas hijas que la adoran y que de repente, se siente sola, que no vale nada, que no tiene nada en la vida. Algo así es el caso que se nos presenta en la película.

Marion Cotillard, interpreta de forma más que notable, a una mujer que, tras mejorar de un periodo de depresión y al parecer estar de baja, desea (con el empujón de marido y una ex-compañera creyéndolo parte de su recuperación, sumado a la necesidad económica) volver al trabajo. El problema es que parecen apañarse sin ella y el jefe les plantea que si se reincorpora, se quedan sin su paga extra, que no puede con ambas cosas. Además, un encargado se ha ido (valga la redundancia) encargando de presionarlos y asustarlos para que tomen el dinero y no voten porque ella vuelva. Instada por los mencionados, irá casa por casa de sus compañeros a decirles que se piensen su voto, que ella necesita volver a trabajar y que está ya bien. Puede parecer un planteamiento algo surrealista, imposible de llevar a cabo, pero los Dardenne nos lo trasladan con toda naturalidad y el propio personaje protagonista, desde la reflexión racional, se pregunta cómo van a renunciar al dinero por más que mendigue, algo que tampoco le entusiasma hacer. Se encontrará casos de lo más variopinto: el que quiere ayudarla y lo hará, el que quiere pero no puede porque también está mal en casa y necesita el dinero, el que no se decide o el que no quiere de ninguna manera.

Los Dardenne, esta vez sí, y al contrario que con "El niño de la bicicleta", convierten la sencillez en una virtud, con una cinta sensible y cercana, con como decía una grandísima protagonista y su lucha tanto interna, con su enfermedad, con su familia y por recuperar su trabajo. Un personaje que evoluciona hasta un gran final, el mejor posible, no siendo nada fácil ponerle punto final a la historia sin caer ni en el "happy end" chirriante ni en el melodramatismo exagerado.

Nota: 6'7
Turbolover1984
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