De vez en cuando vale la pena subir las notas "predecibles": esto es, si la peli está hecha para el oscar, no merecerá menos de 7 (por su producción y bla bla); y si es cine clase b, merodeará el 4. Al carajo con todo porque Braindead le pasa el trapo a mucho cine "serio", y lo hace tan solo a base de escatologías y muñecos de goma.

Vale aclarar que como mucho podemos decir que es cine de culto, pero un cine de culto integral como pocas veces hemos visto. Gore, parodia, ternura, escatología y splatter, todo en uno y basado en la premisa de "no reparé en porquerías". Es tal el desborde que uno pasa del disfrute al estupor, y del estupor a la sobresaturación. De más está decir que son cosas buscadas por el director. Jackson no sorprende: el cine clase b se caracteriza por ser malo, malo en serio, apasionado y desprolijo, chabacano y neurótico. El tema es que Braindead es una maravilla a nivel técnico, un lujo artesanal pocas veces visto. Su repulsión alejará a los sensibles pero atraerá a los que sepan ver que es simplemente excesiva, pero perfecta. De ahí que puedan percibirse los hilos maestros: es la clave del asunto. Esto está dirigido por una muñeca magistral, no por un vendedor de fruta con ganas de vomitar.

Lo cual me hace pensar en su verdadera cara, en si es realmente cine clase b. Solo por el tono, porque lo demás es profesional. Sencillo: el director de El señor de los anillos sigue siendo el mismo, solo cambian las formas.

No sé que clase de droga se metió Peter Jackson para crear una pastrulada así, inclasificable, nunca antes vista. Braindead es una mezcla de gore, comedia negra y zombies. Esta mierda es retorcidamente enferma pero graciosa a la vez, es asquerosa pero divertida. Cada escena es un cague de risa, no hay pierde realmente con esta huevada, la diversión está asegurada. Debo confesar que no soy muy fanático de las películas de zombie, pero cuando una película es originalmente brillante, es imposible no rendirse ante ella y rendirle el culto que se merece.

Un científico viaja a Skull Island para llevarse a un extraño animal mitad rata y mitad perro. Los nativos tratan de impedir que este animal salga del lugar ya que está maldito, pero no logran su cometido. Este animal llega a un zoológico de Nueva Zelanda para su exhibición. Cuando Lionel (Timothy Balme) y Paquita (Diana Peñalver), unos chicos que salen por primera vez juntos, se alejan de la jaula del rata-perro al ver la agresividad de este, la odiosa mamá de Lionel (Elizabeth Moody) que fue a vigilarlos es mordida por el animal. Pronto descubrirán que sus vidas cambiarán luego de la muerte de la mamá de Lionel y su transformación a zombie.

¿La escena más quemada? Sin contar las miles de veces que la mamá de Lionel vomitó e hizo huevada y media, diría la escena del sacerdote al ver los zombies decide pelear a puño y patada limpia con cada uno de ellos, Jean-Claude Van Damme se quedó chico a su lado, los zombies son despedazados uno por uno. La escena más quemada honorífica sería cuando el sacerdote zombie y la enferma zombie follan y el tío de Lionel piensa que este está viendo porno zoofílico de una rubia contra un burro, la cagada. Por otro lado, la frase más pendeja y que fue la mala traducción del título: "Tu madre se ha comido mi perro", imagínate que salgas con una chica y esta diga eso y mires a tu vieja y veas que tiene la cola del perro en su boca, puta madre, qué clase de pastrulada es esa, por Dios.

Jackson vuelve a tirar de imaginación en una cinta que pasará a la posteridad por ser la mejor comedia gore de todos los tiempos.

Tiene escenas que no puedes creer que te rias de lo que ves, pero es inevitable.

Todo un clásico de la sangre y la risa.

Gamberrada genial, el talento del Mr. Jackson primerizo alcanza cotas de hilaridad hemoglobínica que desgraciadamente jamás serán superadas. Es imposible resistirse al carnaval de zombis, amputaciones, canibalismo, tripas pedorreras y líquidos verdes, da igual que no haya guión, que las interpretaciones parezcan sacadas de un episodio de Bugs Bunny y que carezca de sentido de principio a fin. Nunca la destrucción del cuerpo humano hizo tanta gracia. Jamás una madre tiránica y castradora obtuvo un final más adecuado. Pocas veces se ha sacado más partido a una cortadora de césped. Y qué ganas de visitar Nueva Zelanda...

Influenciado notablemente por George A. Romero, Sam Raimi y Stuart Gordon y un confesado amante del género de terror, zombi y gore, Peter Jackson realizo Braindead lo que en español se conoce como Tu Mama se ha comido a mi perro, un filme de culto, referencia del género y considerada por muchos como el filme más sangriento de toda la historia (y tienen bases para decirlo)Debo confesar que al inicio del filme me costó bastante encontrarle el gusto, me centraba mucho en las limitaciones presentadas en las actuaciones, luego entendí que Jackson daba una visión burlista a todo, y ese tono ligero me permitió reírme en muchas ocasiones (más de las que creí que podía), el acabado del filme es bastante bueno, sobre todo en un trabajo monumental de maquillaje y efectos especiales a la vieja escuela (muy bien utilizados), leyendo un poco en otros lugares me di cuenta que en ocasiones en una sola secuencia se gastaban más de 300 litros de sangre artificial, esto con el festín de tripas y vísceras sin duda la hacen la película más sangrienta y gore que recuerdo, aunque todo sea en un tono de cinismo y burla, de hecho el filme realiza una fuerte crítica social a la clase alta de Nueva Zelanda en la cual el personaje que más destaca es el insoportable e interesado tío. De fondo una historia de amor simpática y un complejo de Edipo del protagonista monstruoso (para eso ver el final). Braindead se ha ganado bien su puesto entre los filmes de culto, no es terror no, pero que uno la pasa bien (para los que gustan del genero), eso si es innegable.

Lo Bueno

Un aparatado técnico bien manejado, incluso sorprendente par aun director sin mucha experiencia en ese momento.

Los efectos a la vieja escuela son gloriosos, un trabajo de maquillaje monumental. Aquella escena final en donde la madre sube las gradas persiguiendo a los protagonistas todo un hito.

Buenos momentos de comedia, y personajes tan irreverentes como el extraño bebe zombi.

Litros y litros de sangre…la escena final de la fiesta, le da otro estatus al filme.

Lo Malo

Me parece que al filme le cuesta arrancar, en esos primeros minutos uno realmente duda de lo que ve, y si quiere seguir viéndolo.

La actuación del dúo protagonista, posiblemente Jackson se aferró a las limitantes de estos a la hora de actuar e hizo que su trabajo fuera un poco sobreactuado, el resultado le conviene al filme pero no gusta del todo.