el día que coincida con Carlos Boyero en la apreciación de una película, creo que comenzaré a preocuparme, porque significará que he cambiado y ya no disfruto del cine, y a fe que lo hago

"Ahora me ves" no se ha rodado para ganar un oscar, ni ser una obra de culto, sino para lo que sobradamente logra, con una puesta en escena muy elaborada, un guión que no se le ocurre a cualquiera, un elenco de actores de primera línea dónde destacan Mark Ruffalo y la bellisima y dulce Melanie Laurent, logran que estés sentado frente a la pantalla divirtiéndote, no teniendo que pensar demasiado dado el tono casi desganado de la película a causa de la soberbia actuación como siempre de Harrelson, que cuando acaba y quizás el final sea la parte más floja tienes ganas de salir a hacer algo y encontrarte de buen humor.

La película es sobradamente amena y entretenida para disfrutarla con relax.

“Ahora me ves” no es el trampantojo facilón del que habla gran parte de la crítica profesional, negándole la categoría de película y reduciéndola a un simple espectáculo en formato cine. O a lo mejor sí que lo es, pero a lo grande. Un gigantesco y fascinante espectáculo con forma de película articulado en torno a una serie de grandiosos números de magia unidos por una misteriosa, ágil y divertida trama que tiene un único objetivo: entretener y hacer pasar un buen rato.

Pues no sé. A mí me parece un objetivo cojonudo. Sobre todo porque lo consigue con un ritmo vertiginoso que no deja de acelerar y acelerar, sin un momento de respiro, en un ejercicio de potencia controlada que no recuerdo en mucho tiempo. De hecho, es que no recuerdo que nadie haya puesto tanta carne en el asador desde el primer minuto y no haya dejado de meter más y más carnaza durante toda la película, subiendo más y más las apuestas, colocando más y más sorpresas hasta un truco final a la altura de todo lo que hemos visto. La combinación en el reparto de actores jóvenes y maduros, buenos y villanos, promesas y consagrados, permite tocar todos los géneros - acción, intriga, comedia- y hacer toda clase de humor o diálogos ingeniosos.

Como decía, “Ahora me ves” se puede considerar como cuatro grandes números de magia, potenciados por la música, la iluminación y los encuadres que más realzan espectáculos que reúne mentalismo, ilusionismo, escapismo y prestidigitación, que te dejan pegado al asiento. Por supuesto, todo está amañado para salir bien, pero luego te explican cómo lo han hecho y como los protas y la película da tan buen rollo que dices “bah, vale, puede ser”. Además, toda la película se mueve en una irreal frontera que sugiere que lo que pasa va más allá del ilusionismo, de que hay factores sobrenaturales en juego, pero no, pero sí, pero ah, quién sabe… y engancha al espectador que quiere creer que es posible, que la magia existe, igual que cuando Copperfield atravesaba la Muralla China o hacía desaparecer la Estatua de la Libertad.

En paralelo, hay persecuciones y un interesante juego del gato y el ratón con las autoridades y villanos que van dando la cara poco a poco… en el que no termina de estar claro quién es el gato, quién el ratón, quién el conejo en la chistera y quién la nutria que sorprendentemente sale en el último momento de la caja mágica.

Un gran acierto de película. No hay concesiones al drama, ni al cine protesta, ni a la inclusividad, ni a la innovación, ni a nada que no sea hacer disfrutar. ¿La convierte eso en una película más indigna o menos película? Mis cojones que no. La vi en el cine, la vi antes de ver la segunda parte y me quedo a ver sus mejores momentos siempre que la echan. A pesar de conocer sus trucos, no envejece.

Llevaba mucho tiempo sin escribir una crítica en esta página. Pero esta película que tiene ¡un seis!. Una nota ya aceptable, teniendo en cuenta el nivel de exigencia de los usuarios de este portal, no merece más que un tres raspado.
No entiendo cómo han conseguido semejante reparto impresionante para tomarnos el pelo con esta basura pretenciosa. Es que es todo trampa, todos los giros impresionantes que intentan hacer creer que están dando son tramposos y o chapuceros. Y el final es una burla a la inteligencia que está tan mal desarrollado que queda entre dos aguas, mitad estafa, mitad clifhanger.

No sé por qué nunca tropecé con ella en estos 9 años. Me encantan las películas de robos, estafas, engaños... Y ayer, por fin me propuse verla... y la vi. Y me decepcionó... Si.

Contiene elementos atractivos durante los primeros minutos; hasta que se desarrolla todo el artificio, porque AHORA ME VES... es puro artificio, como una película de ciencia ficción, sin ciencia y mucha ficción.

En ciertos tramos, a lo largo de las primeras secuencias, te cuentan lo que sucede, aunque carezca de explicación, no puedes creer absolutamente nada, al desarrollarse encajándolo; al apretar se rompe dando como resultado un aluvión de crítica negativas, la mía incluida.

Demasiado larga y con secuencias de persecuciones para meter un poco de acción. No me ha convencido.

Al cabo de media hora no sabe uno cómo sentarse en la butaca y en la segunda mitad hay que hacer verdaderos esfuerzos mentales para intentar comprender de qué va la cosa. El desenlace es absurdo e inverosímil teniendo en cuenta el desarrollo de los acontecimientos.
En fin, una mala película.