Las alas de la vidaDocumental
7,9
3.103
Documental
El médico Carlos Cristos, que a sus 47 años padece una enfermedad terminal, llama a un director de cine amigo suyo y le propone que registre su lucha por vivir y morir dignamente, sin dramatismo, y "si es posible con una sonrisa", acompañándolo en el tránsito entre la vida y la muerte. (FILMAFFINITY)
17 de mayo de 2008
17 de mayo de 2008
25 de 32 usuarios han encontrado esta crítica útil
Este pedazo de vida respira cine por los cuatro costados:
Emociona. Entretiene. Educa. Da Ejemplo.
Ejemplo de cómo vivir en base a unos principios firmes
Ejemplo de cómo transmitir conocimiento de forma humilde y cercana
Ejemplo de cómo relativizar las desgracias propias y ajenas aceptando que el ciclo vital es limitado
Ejemplo de cómo luchar contra algo desconocido con una sonrisa en los labios
El que siempre da más de lo que espera recibir no debería irse. Su lucha es la energía que mantiene vivo al mundo.
Gracias por cedernos parte de tu ser, Carlos. Es un privilegio haberte conocido. Que las alas de la vida te abracen en un sueño reparador.
Emociona. Entretiene. Educa. Da Ejemplo.
Ejemplo de cómo vivir en base a unos principios firmes
Ejemplo de cómo transmitir conocimiento de forma humilde y cercana
Ejemplo de cómo relativizar las desgracias propias y ajenas aceptando que el ciclo vital es limitado
Ejemplo de cómo luchar contra algo desconocido con una sonrisa en los labios
El que siempre da más de lo que espera recibir no debería irse. Su lucha es la energía que mantiene vivo al mundo.
Gracias por cedernos parte de tu ser, Carlos. Es un privilegio haberte conocido. Que las alas de la vida te abracen en un sueño reparador.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
PD.1 ¿Esta película es española? Todavía estoy recuperándome de la impresión...
PD.2 Los actores SABEN HABLAR. Y Carlos Cristos se expresa mil veces mejor que el 90% del gremio de actores de este país.
PD.3 Recomendarle a Jaime Rosales ver esta película. Aquí se respira naturalidad. Y no necesita de dobles pantallas
PD.2 Los actores SABEN HABLAR. Y Carlos Cristos se expresa mil veces mejor que el 90% del gremio de actores de este país.
PD.3 Recomendarle a Jaime Rosales ver esta película. Aquí se respira naturalidad. Y no necesita de dobles pantallas
23 de abril de 2007
23 de abril de 2007
17 de 19 usuarios han encontrado esta crítica útil
Conmovedor documental realizado en primera persona por un hombre a quien su enfermedad (si no el documetal hubiera sido muy diferente) no mermó sus agudas cualidades mentales. Debería proyectarse en todas y cada una de las escuelas de este país, así como verse por todos y cada uno de los profesores, psicólogos y cualquiera que tenga un ápice de sentido común. La ética de su coherencia despunta del rostro de Carlos hacia las retinas húmedas del espectador, huyendo del sentimentalismo, a pesar de lo inexorable de la enfermedad. Se convierte en un durísimo retrato de la llegada de la muerte, pero vista desde el lado de un paciente que asume su destino con la inteligencia propia de un ser sumamente pletórico de sabiduría acerca de su destino. Se proyecta en un cine pequeño de Madrid, pregunta cuya respuesta carece de significado porque cada persona a la que le interesó "Mar adentro", de Amenábar debería cumplir su penitencia y ver ésta, así como aquellos que defienden un cine comprometido y veraz. Es dura, arranca lágrimas y no tiene salida porque se sabe el fin; y así es la vida misma.
5 de noviembre de 2009
5 de noviembre de 2009
16 de 19 usuarios han encontrado esta crítica útil
Vida.Vida.Vida.Vida.Vida.Vida.Vida.Vida.Vida.Vida.Vida.Vida.Vida.Vida.Vida.
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Vida.Vida.Vida.Vida.Vida.Vida.Vida.Vida.Vida.Vida.Vida.Vida.Vida.Muerte.
¿Ven? ¿Se dan cuenta de lo insignificante que es la muerte comparada con la vida? Ya hagamos la comparación temporal, emocional, espacial...la que quieran. Incluso gráfica como en este caso. La vida siempre gana. Cójanla, disfrútenla, vívanla, aprovéchenla. ¿La muerte? pues ya no enseña Carlos que hasta el último microsegundo que nos toque estar aquí merece más la pena que ella. Bravo Carlos y gracias por enseñarnos tanto en tan poco tiempo.
Vida.Vida.Vida.Vida.Vida.Vida.Vida.Vida.Vida.Vida.Vida.Vida.Vida.Vida.Vida.
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¿Ven? ¿Se dan cuenta de lo insignificante que es la muerte comparada con la vida? Ya hagamos la comparación temporal, emocional, espacial...la que quieran. Incluso gráfica como en este caso. La vida siempre gana. Cójanla, disfrútenla, vívanla, aprovéchenla. ¿La muerte? pues ya no enseña Carlos que hasta el último microsegundo que nos toque estar aquí merece más la pena que ella. Bravo Carlos y gracias por enseñarnos tanto en tan poco tiempo.
13 de octubre de 2010
13 de octubre de 2010
13 de 14 usuarios han encontrado esta crítica útil
‘Jodido pero contento’. Así se queda el espectador, volando libre y flotando en un viaje hacía la incertidumbre. La historia de Carlos Cristos es un viaje en caída libre sin motor. El final es conocido. No hay vuelta atrás y la misión del camino es morir dignamente. Antoni P. Canet es autor de “La camisa de la serpiente” y “Amanece como puedas”. Poca relación y conexión con un documental de la entidad de “Las alas de la vida” salvo lugares comunes de rebeldía y despertar. Lo que antes fallaba en un vuelo en picado y sin salvación ahora emerge en un vuelo directo al cielo y al corazón.
No se esconde que hay cámaras detrás de esas imágenes, que todo es un documental. Que es cine… Que hay una evolución dramática en la historia a través del montaje. El aprendizaje de su hija frente al piano abre el trazo de una elipsis que determina el paso del tiempo y la cuenta atrás del trayecto. Pero hace algo complicado con un tema caliente tan propenso al teledrama barato. Evita la sensiblería y es capaz de plantear y hundirse en temas más hondos y profundos.
Pero el acierto de Canet es no convertir en las en un tratamiento mediático a lo Jade Goody sino utilizar herramientas cinematográficas y una historia real con ánimo terapéutico. Es cierto que ‘al empezar a escribir todo se vuelve ficción’ tal y como indicaba uno de los protagonistas de “Cosas que no se olvidan” de Todd Solondz. E incluso otro referente podría ser la protagonista de “Tesis” mirando a la pantalla y diciendo ‘Me llamo Angela. Me van a matar’. Un brutal golpe de efecto dramático. Pero los mecanismos trágicos son diferentes aquí: sabemos que el protagonista sufre una enfermedad terminal y éste proceso va a ser filmado y que la ficción, a través de la mirada documental, se convierte en herramienta. Pero no se trata de una apología de la vida simplemente sino del triunfo sobre la muerte. Es realidad pero se convierte en la más hábil, inteligente y directa de las ficciones.
“Las alas de la vida” hace honor a su título como triunfo a la caída a la que nos enfrentamos los mortales. Unas alas que cada uno lleva escondidas y que Carlos Cristos nos enseña a utilizar. Los estudios de Hollywood destinan millones a generar héroes de cartón, explosivos por su efectismo, sin reverso y sin perpetuidad. Antoni P. Canet ha encontrado un héroe capaz de atravesar corazones con un testimonio y una sonrisa: ‘Jodido pero contento’.
No se esconde que hay cámaras detrás de esas imágenes, que todo es un documental. Que es cine… Que hay una evolución dramática en la historia a través del montaje. El aprendizaje de su hija frente al piano abre el trazo de una elipsis que determina el paso del tiempo y la cuenta atrás del trayecto. Pero hace algo complicado con un tema caliente tan propenso al teledrama barato. Evita la sensiblería y es capaz de plantear y hundirse en temas más hondos y profundos.
Pero el acierto de Canet es no convertir en las en un tratamiento mediático a lo Jade Goody sino utilizar herramientas cinematográficas y una historia real con ánimo terapéutico. Es cierto que ‘al empezar a escribir todo se vuelve ficción’ tal y como indicaba uno de los protagonistas de “Cosas que no se olvidan” de Todd Solondz. E incluso otro referente podría ser la protagonista de “Tesis” mirando a la pantalla y diciendo ‘Me llamo Angela. Me van a matar’. Un brutal golpe de efecto dramático. Pero los mecanismos trágicos son diferentes aquí: sabemos que el protagonista sufre una enfermedad terminal y éste proceso va a ser filmado y que la ficción, a través de la mirada documental, se convierte en herramienta. Pero no se trata de una apología de la vida simplemente sino del triunfo sobre la muerte. Es realidad pero se convierte en la más hábil, inteligente y directa de las ficciones.
“Las alas de la vida” hace honor a su título como triunfo a la caída a la que nos enfrentamos los mortales. Unas alas que cada uno lleva escondidas y que Carlos Cristos nos enseña a utilizar. Los estudios de Hollywood destinan millones a generar héroes de cartón, explosivos por su efectismo, sin reverso y sin perpetuidad. Antoni P. Canet ha encontrado un héroe capaz de atravesar corazones con un testimonio y una sonrisa: ‘Jodido pero contento’.
11 de mayo de 2007
11 de mayo de 2007
12 de 13 usuarios han encontrado esta crítica útil
Magnífica película, donde nos muestra la otra cara de la muerte, esta vista casi siempre como un drama, no es así aquí donde Canet (desconocido para mi desgracia hasta este momento) va narrando a lo largo de la película de una forma sublime en el cual con unos excelentes planos cortos nos va metiendo en la angustia que esta viviendo Carlos para llegado el momento justo hacer un giro y mostrarnos la cara mas alegre y carismática de Carlos.
Me parece todo un ejemplo Carlos , sobre todo por su iniciativa a dejarnos un documental que habla de la vida, de la que rebosa, y hacernos ver la muerte como algo natural.
Este documental debería ser mostrado y visionado por todos, primero por su gran calidad como película-documental y sobre todo por lo que nos enseña este gran persona que es Carlos Cristos.
Me parece todo un ejemplo Carlos , sobre todo por su iniciativa a dejarnos un documental que habla de la vida, de la que rebosa, y hacernos ver la muerte como algo natural.
Este documental debería ser mostrado y visionado por todos, primero por su gran calidad como película-documental y sobre todo por lo que nos enseña este gran persona que es Carlos Cristos.
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