Una película que te atrapa desde el principio, y nos introduce en la historia que nos cuenta Fred MacMurray, es una Obra Maestra en todos los sentidos porque sirve de referente a películas posteriores, donde Barbara Stanwyck se convierte en un paradigma de la "Mujer Fatal", sus diálogos punzantes en donde parece que los protagonistas parecen que tuvieran cuchillos en vez de lenguas, el trío de actores esta impecable especialmente Edward G. Robinson ese pequeño monstruo de la actuación, en resumen una película soberbia, que te hace querer más el cine.

Ni un sólo punto sin encuadrar dentro de la trama (salvo el indicado en el spoiler), fantásticas actuaciones de MacMurray y Barbara Stanwyck. Como en casi todas las películas de Wilder, el secundario (en este caso, un "pequeño" gran Edward G. Robinson) bordando el papel y dejando frases magistrales ("Mucho más cerca, Walter"). Wilder lleva el control absoluto del metraje, sin dar un respiro al espectador y midiendo con su portentoso buen saber hacer los tiempos de la película. Absolutamente recomendable.

No me acuerdo ahora mismo quién decía esto pero está en lo cierto. Es la 1.15h. de la madrugada y no tengo gana de escribir mucho. La película es una obra maestra. Qué diálogos, qué planos, qué argumento, qué manera de meter "voz en off" en el transcurso de la trama. Qué manera de DIRIGIR. Si Wilder hubiese sido arquitecto podría empezar las casas por el tejado y no se le caerían. Palabra.

Se dice que cuando Hitchcock vio esta película, telegrafió a Billy Wilder comentándole que, tras Perdición, las dos palabras más importantes en el mundo del cine eran "Billy Wilder". Y con razón. Ver cómo el serio Fred MacMurray, la excelente y sensual Barbara Stanwyck y el gran secundario Edward G. Robinson bordan sus papeles, es un lujo y un placer para los sentidos. Wilder consigue que nos identifiquemos con cada personaje, que suframos con ellos en los momentos de mayor tensión, que veamos cómo sus sueños se forjan y desaparecen (o no).
Es un film excepcional en todos los sentidos, con un gran final y unos diálogos inolvidables (impagable la primera despedida entre MacMurray y Stanwyck, flirteo en estado puro).

Perdición
1944
Billy Wilder

Arquetipo del cine negro, Perdición de Billy Wilder es una de las mejores películas de la era dorada de Hollywood, así como el primer éxito de su director cuya filmografía incluye films como "Sunset Boulevard", "Con faldas y a lo loco" y "El apartamento".
Fred MacMurray es un vendedor de seguros que se ve tentado por Barbara Stanwyck cuando le seduce con la idea de venderle a su marido un seguro de vida para luego asesinarlo y quedarse con el dinero de la indemnización.
Un elemento importante del film es la actuación de Stanwyck (que nos introduce por primera vez la idea de la "femme fatale"), siendo filmada con tal elegancia que nos hace sentir la misma debilidad que el personaje siente y nos hace entender como este va cayendo hacia la perdición.