Una película que nos pone en contexto de la guerra de los ingleses contra Francia en el S.XVIII, donde unos miembros del parlamento están a favor de la paz y otros a favor de ganar la guerra. De medias de este contexto esta la reina Anne de Inglaterra, la cual está enferma de gota, se encuentra algo inestable a nivel emocional y psicológico, y, por último, un personaje fuertemente manipulado por miembros de su corte/poder. Su representante Sara es la que gestiona el reino desde las sombras, personaje que empieza siendo autoritario, manipulador, sucio (está casada con el marido en la guerra y se lo monta con la reina a beneplácito de esta constantemente), etc.… Por otro lado, está la sirvienta recién llegada (la cual era dama antes) llamada Abigail. Abigail es un personaje que en contraposición a Sara es más noble, honorable y respetuoso, pero pronto debido a la influencia del poder y el favor de la reina escala en la corte hasta convertirse en la “favorita”, eliminando del mapa a Sara con tretas sucias que la obligaran al destierro de Inglaterra. La película juega mucho con la comedia negra, con la sexualidad abierta, los vicios del poder, la destrucción de valores, la historia y otros temas. El juego final y guiño principal de los conejos que dispone la reina como ausencia de sus abortos e hijos perdidos, es un guiño total a las damas y comadronas con las que se acostaba. Abigail paso en el final del film a convertirse en alguien con menos escrúpulos y más malvada que Sara (llegando a casi matarla y olvidando el amor), pero el director deja claro quien es aun con todo su nuevo poder: la que masturba a la reina cuando ella quiera. Otro dato del film curioso es que recuerda muchísimo a Barry Lyndon, film de Kubrick; salvo por los ejercicios de rodaje con planos de pasillos, planos de ojos de pez, etc.…