Buscando transmitir desasosiego, argento diseña un escenario tan estridente que no resulta creible y unos personajes caracterizados de forma tan exagerada que parecen caricaturas sacadas de muchachada nui y unas interpretaciones exageradas y sobreactuadas, lo que sumado a un clímax que se resuelve de forma demasiado rápida y simple, hace que la película se aleje de ese terror y desasosiego constante que busca transmitir y parezca una mala caricatura.
Así como en otras ocasiones me niego a tolerar remakes y reboots que llegan demasiado pronto, quizá en esta ocasión sí sea necesario reimaginar la película con los medios actuales (veremos que sorpresas nos depara la nueva versión que aún no he podido ver).