Haz click aquí para copiar la URL
Rusia Rusia · Stalingrado
Voto de Ferdydurke:
2
Drama José Martí, entre los 9 y los 17: los únicos años en que conoció de cerca a su patria y en los que aprendió a amarla y entenderla, para hacer la magna obra que le tomó el resto de su vida. No es una biografía: es un itinerario espiritual inspirado en la infancia y adolescencia del héroe nacional cubano José Martí. (FILMAFFINITY)
10 de agosto de 2020
3 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
El niño y el mundo.
A galopar, a galopar, hasta enterrarlos en el mar.
Es muy mala, eso es obvio. Política e históricamente es una chufla; una inefable suma de escenas gruesas, de groseras simplezas y burdas propuestas, un panfleto a lo bestia, maniqueo, grotesco, nefando. Del resto, no hay mucho.
En la primera parte, de más chico, todavía; el bendito se masturba y mira animales y perece bueno y quiere mucho a los suyos; pero ya de adolescente se convierte en un fanático hierático que ni siente ni padece, capaz de quedarse helado, impasible, como un robot frío, mártir y tentetieso, aunque a su madre se le escape la vida a puro grito, pidiendo auxilio, que él la ayude un poco, y nada, ahí se queda parado, mudo, seguro que orgulloso de su heroísmo y delirio, hasta que llega otro y le salva. Ya no tiene ni sexo ni sentimiento, lo perdió todo por el camino.
La fotografía es cuidada (con aire acusado de telefilm, también es cierto) y los actores se esfuerzan mucho, demasiado, pero todo está viciado de antemano, al presentar la Historia en forma de espectáculo melodramático ahíto de un histerismo nefando que transforma todos los acontecimientos en una miniatura alocada y gritona, que no explica nada ni esclarece ningún contexto, solo ruido y furia, barbarie y espanto. El foco se reduce a confirmar los prejuicios con los que empezamos, no hay ni indagación ni investigación ni profundización, solo pirotecnia huera y sensacionalista, epidermis, animalidad, bajos instintos, tratar de exacerbar mediante lo más zafio y bruto, como si el espectador tuviera un recipiente vacío en lugar de, se supone, cabeza con pensamiento propio. Es tan tosca que aburre y distancia, nada importa, solo se contorsiona como si sufriera un ataque de salvaje epilepsia.
Lo mejor es el final, esas pocas líneas de un poema de Martí tienen más belleza y verdad que todo lo anterior tan cutre y basto.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Ferdydurke
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow