“Battlestar Galactica” fue, sin ninguna duda, una de las mejores series de ciencia-ficción de los últimos años (puede que incluso la mejor a pesar de que no me gustase su final). Por esta razón me acerqué a esta serie con cierto recelo, ya que no sabía muy bien qué es lo que me iba a encontrar. Si estás en la misma tesitura que un servidor, entonces te aconsejo que veas el episodio piloto por dos motivos: primero, con él te vas a hacer una idea muy aproximada de lo que te va a ofrecer la serie (personalmente, me ha dado más o menos lo que me esperaba). Y segundo, creo que te va a gustar aunque se trate de una precuela.

Para los fans de “Battlestar Galactica” estaba claro que era imposible hacer una secuela tal y como terminó la cuarta temporada de la serie, así que olvídate de ver atractivas escenas de batallitas de naves espaciales o explosivas espías cylon como la número 6. En “Caprica” lo que tiene lugar es una mirada hacia atrás en el tiempo, una mirada a lo que sucedió antes de que empezara la guerra entre humanos y cylons. No obstante, sí que hay algunos excelentes guiños que no pasarán inadvertidos para sus fieles seguidores como, por ejemplo, los del apellido “Adama”, el juego de la pirámide o cuando bautizan al robot como “cylon”.

“Caprica” sigue siendo ciencia-ficción con una estética de corte futurista, realidades virtuales, robots molones (por cierto, impagable el simpático robot que abría la puerta de la casa de los Graystone), alguna que otra navecilla voladora y demás cositas fantásticas, pero a la hora de la verdad apuesta de largo por ser un drama político-religioso. En efecto, el plato fuerte de esta serie es el drama y la religión. No te preocupes por esto porque la carga dramática está muy bien llevada en todo momento y el tema religioso, que tanto echó para atrás en la serie original, aquí han sabido tratarlo de mejor manera (tiene algunas cosas bastante buenas como la trama policial relacionada con este asunto o la idea de la creación de un paraíso artificial). Puede que el tema de la religión se te haga un poco pesadito, pero te aseguro que comparado con “Battlestar Galactica” son peccata minuta.

Resumiendo, “Caprica” posee una historia, unos personajes y un apartado técnico más que solventes para configurar una serie que sea de tu agrado y, además, a pesar de que su pulso narrativo sea lento no hará que te aburras. Personalmente, lo único que no me ha gustado es que en la parte central de la serie se nota muchísimo que estiran algunas tramas con objeto de desarrollarlas en futuros episodios o en hipotéticas futuras temporadas. No obstante, a pesar de los pesares, os la recomiendo. “Caprica” no me ha disgustado en absoluto, es más, incluso me ha parecido una buena serie.