Extraña película de misterio y suspense mal contada. El argumento es muy rocambolesco. Un misterioso personaje con la cara literalmente partida por un rayo, ofrece a matrimonios menores de una edad concreta y con un hijo, la posibilidad de ganar un millón de dólares si aprietan el botón de una enigmática caja que provocará la muerte de una persona desconocida. Tan sólo la presencia del veterano Frank Langella aporta algo de tensión a esta absurda propuesta fílmica, en la que los actores, por mucho que se esfuercen, no logran convencernos por lo disparatado del argumento.