Bueno... Antes que nada, me alegra decir que no fui a ver Frozen al cine, porque la verdad las entradas en mi país están muy caras. Y prefiero esperar "Cómo entrenar a tu dragón 2", antes que ver una película de princesas. Primero la animación es impresionante... Pero fíjense ustedes, son muñecas... Muñecas sin emociones. Apenas fruncen el ceño o su tristeza es muy aislada. No veo fuerza en este aspecto. No hay emociones en sus caras. Los hombres dan asco. Parecen babas parlantes.

Sin embargo, la primera parte me gustó. Los primeros números musicales (pese a que odie siempre oír cantar a los personajes) en esta película, o al menos la primera parte con "hagamos un muñeco" y "libre soy" trasmiten mucho sentimiento y además ayudan a avanzar la trama. Las que siguen... Colóquense tapones en los oídos.

Los secundarios, como el reno, un aburrimiento. Al igual que ese muñeco de nieve. Además de presentar un diseño tan precario... Es horrible desde mi punto de vista. Está bien que es como un recuerdo de la niñez de estas jóvenes, digamos el espíritu de sus años dorados. Pero, por favor, háganlo más creíble. Es horroroso. Yo lo odie. Al igual que a los renos en tierra de osos... O hermano oso.

Ayer vi Enredados y las comparaciones son desacertadas. Rapunzel y el ladrón (me olvido su nombre o cómo se escribe) gozaban de lo que en Frozen faltó, expresiones, movimientos divertidos, mucho humor. Maximus, el caballo, no tiene comparación. La aventura es divertida y llevadera, no te llega a aburrir, mientras que en Frozen, apenas Elsa termina su magnífico castillo de hielo, oh sí, ese formidable castillo... (Por cierto...¿a nadie se le ocurrió mostrar algo más que las escaleras y ese candelabro? Porque no mostraron un poco la solitaria vida de Elsa... En vez de las aburridas aventuras de Anna con el vendedor de hielo) Bueno después de libre soy, que te sube el ánimo por los cielos, la película sufre de un abismo emocional importante. Me pregunto si a esa hora, habrán puesto a trabajar a otro guionista...

En fin, me quedo con Enredados, película que te mantiene atento, y no como Frozen, cuya protagonista Elsa... Pasa a secundarios... O casi desconocida luego de su canción. Anna no goza de mi simpatía. Trata pero no alcanza esa rebeldía o espíritu aventurero que intentan plasmarle. Ni hablar del vendedor de hielo.

Esperaré con ansias la venida de los estudios Dreamworks, que por lo menos intentan darte un buen entretenimiento y no venderte muñequitos. Donde los personajes son más reales, sufren de cosas. Son heridos en las guerras (como pasa en la realidad, y ésto sin perder la magia del cuento) Pero bueno. Lleven a sus niñas a comprarse las muñecas de Elsa y Anna. Dos hermosas mujeres, que no tienen ningún defecto físico. No vayan a comprar a Hipo, por Dios!!! Le falta una pierna!!!!

Perdón por lo último, pero es así como los niños están creciendo. Creyendo en un mundo perfecto. Hay películas que te muestran la vida y otras que te la siguen disfrazando. Hasta luego.