Haz click aquí para copiar la URL
España España · Madrid
Voto de MigueL:
8
Acción. Drama El duelo entre Kenshin Himura y el maligno Shishio Makoto sigue sin resolverse. El conflicto entre los dos guerreros decidirá el destino de Japón, y pondrá un bombástico punto final a la memorable adaptación cinematográfica del manga de Nobuhiro Watsuki. (FILMAFFINITY)
7 de agosto de 2021
Sé el primero en valorar esta crítica
Una inmejorable forma de empezar este tercer capítulo de la saga, es apostar por "Hiko Seijūrō", que se adueña de casi todo el primer tramo del film. El actor y cantante Masaharu Fukuyama, con su mirada ya transmite años de experiencia para lo que supone meterse en la piel de un sabio maestro. Igual la considerable planta que posee, o la firmeza que desprende en el personaje que interpreta. Esta conclusión a la 'saga de Kyoto' es el festin esperado que cerraba en 2014 una trilogía que va de menos a más.

ENRIQUECEDORA LECCIÓN
____________________________

Como decía, la película arranca con el suficiente vigor en la traslación del episodio que atañe al pequeño "Shinta", en ese terrible capítulo de su vida enterrando cadáveres. Del impacto, el dolor y la soledad nace la leyenda con la mítica frase del hombre que "bautiza" al apenado niño. Sus destinos coinciden de nuevo, y el entrenamiento para regresar como un vendaval, es de lo mejor de las tres películas y la historia del manga en general. Un aprendizaje a través de apretar el orgullo, sin exceptuar la dura disciplina en un viaje de mística y espiritualidad. La lección de vida que recibe el protagonista sobre el fracaso, el riesgo del sacrificio a cambio de nada, es lo que le hace abrir los ojos ante el erróneo pensamiento de vivir un engaño. Superarse como samurái, siendo capaz de emprender sus convicciones por otro camino, pero sin rechazar sus ideales, siendo esa la clave. El mensaje de esta tercera parte subraya esa idea en varios frentes. Personas atadas a una manera de vivir que o rectifican, o son condenadas a la perdición.

TODO ESTÁ PODRIDO
______________________

No se llega a mostrar el riesgo mortal del entrenamiento. Todo el que conozca la trama original, supone de antemano lo que se materializa fuera de cámara entre maestro y discípulo. Donde si va un paso más allá la película es en el cometido del villano. No solo al ejercer mayor destrucción, sino al plantear de forma hábil como señalar la corrupción política, y dejar por lo tanto un retrato en el que nadie se escapa de tener dudosas intenciones o falta de moralidad. El mangaka Watsuki lo describía de un modo más disimulado por la boca de sus personajes con pequeñas frases tratando de hacer entender, que los gobernantes de Japón no eran más que cobardes despreocupados. En esta adaptación no, se responsabiliza en primera línea a los mandatarios responsables, y es más, involucrando al protagonista de por medio para los intereses del enemigo.

Potenciando todavía más el panorama, la tormenta perfecta llamada Aoshi en su cruzada personal, se estampa de lleno contra la realidad en una furiosa pelea llena de garra, pero la agilidad y temple del ansiado adversario, evita la ciega búsqueda de honrar la memoria de los camaradas caídos, como el sendero hacia ninguna parte. Un maestro de la espada haciendo resurgir a otro del abismo, y este relevando el verdadero sentido de la existencia a un tercero. Y así, con esta cadena de favores, se pone punto y a parte a uno de los personajes de segunda fila que mejores escritos está.

UN DESPERTAR, PÓLVORA Y FUEGO
_____________________________________

Pasado el ecuador, todavía hay hueco para dar por sentado el vínculo que existe entre Kaoru y Kenshin. Primero, un acto de generosidad en la primera entrega, que es devuelto con creces. En común una doctrina compartida. Después, se aviva la llama de la ilusión, para acabar en un devoto cruce de miradas, que sugiere uno de los tesoros más preciados que se puede tener, confirmándose una plácida historia romántica que florece lentamente. La escena de ella en la playa con el pelo suelto habiéndose recuperado, es de gran belleza simbolizando una melancólica añoranza.

Lo relacionado con la traca final, es curioso como la Ova de 2011 titulada 'Shin Kyoto Hen', se transforma en una primordial influencia para el desenlace. Una maniobra inteligente sin duda, así se acapara todo en un mismo lugar y quedan lejos las complicaciones argumentales adaptando el conflicto definitivo. Si la mitad anterior es de primera categoría, esta resolución no es menos. Con tan bajo presupuesto, nada que envidiar a producciones hollywodienses. El significado de la palabra espectáculo se queda corto. En serio, se acaban los adjetivos para describir la última media hora. Desde los enérgicos combates, pasando por una respetada iconografía de las acciones que se suceden en la fuente original, hasta llegar al encarnizado intercambio de espadas entre el héroe y su némesis más reñida.

Por el camino se quedan ignorados los integrantes más insustanciales del 'JupponGatana', cosa que se agradece, para únicamente dirigir la mirada en los rivales importantes. Se dedican unos pocos segundos en describir el porque de sus actos como grupo, definiendo a tres o cuatro de ellos como marginados de la sociedad. Detalle a valorar. Algunos fans impondrán sus quejas personales por no poder ver más del 'JupponGatana', pero era eso, o el apoteósico cuatro contra uno final. Yo lo tengo claro, prefiero lo segundo.

En referente a lo menos atinado, se reitera demasiado el innecesario uso del flashback. No hace falta recordar ciertas imágenes ya repetidas anteriormente en las otras películas. Por otra parte, el conveniente margen de tiempo que se garantiza en la batalla naval entre cañonazos varios no es verosímil. Y la interrupción del segundo asalto entre Kenshin y Sōjirō se siente forzado como el enfrentamiento del manga, aunque aquí se trate de dar una justificación más razonable. Se me olvidaba. La ridícula actuación del actor que hace de "Hōji Sadojima" es un bochorno mayúsculo.

-Continua en zona SPOILER-
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
MigueL
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow