The Fake

La historia es creíble, ya que en este mundo siempre hay gente dispuesta a estafar a las almas cándidas, aprovechándose de su necesidad, dolor, o el mismo hecho de que en su infelicidad sólo les quede aferrarse a una fe de esperanza ficticia para encontrarle un sentido a sus desgraciadas vidas.

La película crítica a las religiones, en especial a las sectas. Y a todos los estafadores, pero también a las circunstancias sociales de vulnerabilidad que padecen las personas, que empujan y asfixian a los individuos, que no encontrando una salida para poder escapar de sus pozos de desdicha, en su propia desesperación, se vuelven auto-destructivos. Provocando que aumente el oscuro caudal hasta que les termina ahogando.

Es también una crítica al maltrato que padecen los hijos. Y una muestra de cómo los propios progenitores son en muchas ocasiones no los que dan la vida, sino los que proporcionan la muerte en vida a sus propios hijos.

Una historia muy cruda, profunda y dramática.

A mí no me gustan los dramas, porque me dejan mal, por eso me suelo decantar por otros géneros que me entretengan o distraigan.
Pero hay que considerar de forma objetiva que la película es muy buena. Y está muy bien realizada. Escenifica y expresa muy bien lo que pretende por medio de la animación.
Es la razón por la cual le doy un 9.

Valiente película que trata un tema de base tan engorroso como es la religión y a quien muchas personas les echará para atrás. En The Fake no hay héroes, tan sólo estúpidos y villanos, personas que buscan la salida fácil a todo y esa salida más fácil es la religión. Hay quien se mete en las drogas, hay quien se mete en el juego, hay quien se mete en la religión... cada persona busca su salida y en muchas ocasiones, la salida fácil.

En esta historia, se supone que un pueblo va a ser sepultado por la construcción de un embalse y todos los vecinos venden sus tierras. Este hecho, que no se sabe si es algo preparado por los estafadores o es algo que va a suceder de verdad, atrae a los buitres que preparan una estafa mediante la religión. Todos los nuevos feligreses no dudan en dar todos sus ahorros a esta nueva iglesia y a sus predicadores, pues les prometen construir con ellos un nuevo hogar en una comunidad religiosa y ya de paso, el cielo. Pero como en todo negocio siempre hay un pero, en este ese pero es el único habitante despierto, un gran hijo de puta maltratador, agresivo y mala persona que va descubriendo la trama primero por azar y después por obsesión. ¿Es casualidad que un expresidiario reconozca a otros delincuentes? Obviamente, no.

La trama se va desarrollando intercalando las historias de los estúpidos pueblerinos, los estafadores matones, el pastor y el expresidiario. Hay múltiples personajes que buscan la redención pagándola, buscando el camino fácil, siendo débiles criaturas a las que los estafadores engañan diciéndoles tan sólo lo que quieren oír. En todo esto, se ven involucrados el pastor y el expresidiario, que son los personajes que más desarrollo tienen, ya que ambos son perseguidos por su pasado y buscan una salida desesperada.

En resumen, es una película bien interesante con una muy buena animación, que recomendaría a cualquier persona que no busque la salida fácil. No dejará buen sabor de boca a todos, pero es que la realidad en sí no suele dejarlo.

He viajado a Latinoamérica al menos una docena de veces y mis viajes no son de resort y pulserita, sino que voy a conocer la realidad de lugares humildes. Puedo decir con total certeza, que estos lugares abundan mucho los pastores evangelistas y que en muy poco tiempo sacan mucho dinero de los pobres ignorantes. Puedes ir a muchas comunidades indígenas peruanas donde ya ha llegado dicha corrupción y entenderás lo realista que puede ser esta película.

Lo más interesante de esta película es la historia y el desarrollo o viaje que viven los personajes en ella, principales y secundarios.

Me pasa lo mismo que con "The King of Pigs" del mismo director, el estilo de animación no me acaba de agradar a la vista, aunque en esta por lo menos los humanos gozan de una mayor expresividad y ya no parecen maniquíes de las rebaja de El Corte Inglés.

Es una película más fácil de ver que y con un tema duro pero menos desagradable de mostrar en la ficción que el de los abusos en las clases y los malos tratos en los alumnos (o por lo menos a mi me lo parece). Aunque debe ser que estoy más acostumbrado al anime japonés y el estilo de dibujo de Korea del Sur aún no estoy suficientemente acostumbrado y por eso me rechina.

Quizás cuando vuelva a verla dentro de algunos meses o años mi opinión cambie sobre esta y la otra película, pero hasta entonces...

The fake es mucho más que animación para adultos. Es nada menos que un thriller coreano de joyería. ¡No podía ser menos! Corea del Sur viene desde hace tiempo dando cátedra de cómo hacer cine estimulante, energético, vehemente y letal.

Pensar en animación y Asia no tendría porqué llevarnos a pensar en Corea del Sur, pero bueno. Aquí estamos… hablando de una película coreana de animación para adultos. Sin más preámbulos les comparto mi crítica de The Fake del director Yeon Sang-ho.

La historia es la siguiente: un pequeño pueblo rural está a la espera de ser inundado para hacer una represa. A la par, llega un Pastor evangélico de quien se dice hace sanaciones. De manera casi inmediata todos los habitantes se harán devotos de su iglesia.

Gracias a ello, comenzará a fraguarse una secta bajo falsas sanaciones y promesas, bajo consignas como la de asegurar un lugar idílico en el cielo, o el paraíso mismo en la tierra. Pero no todo es como lo pintan: un mafioso y sus matones tendrán algo que ver en el asunto.

Min-chul es un violento borracho, ludópata y agresor. Absolutamente problemático. Un ser despreciable. De la casta más baja de la tierra, y que sin embargo cuenta con una familia normal, a la cual maltrata debido a sus fuertes adicciones.

No tardará mucho en darse cuenta de que todo es una farsa y dar con el trasfondo del asunto. El problema estará en cómo convencer a su familia, amigos, a la policía y claro… a los fanáticos religiosos, porque, seamos honestos: ¿Quién le creería a un borracho delirante?
En lo que respecta a la animación misma, no podemos hablar que estamos frente a un trabajo alucinante, pero sí afirmar que resulta muy atractiva (entre otras cosas) porque rompe con esa ley del animé de hacer a las personas sin rasgos orientales.

Lo que vemos aquí son coreanos. No hay duda. Rasgos sumamente asiáticos. Nada de ojos grandes, pelos rubios, fucsias o colorines. La estética está bien cuidada y eso siempre se agradece.

Esta combinación es sencillamente deliciosa.

Muy recomendada.

Curioso filme de animación del director de Estación Seúl y Train to Busan que relata la desesperada necesidad de un pueblo surcoreano amenazado por la construcción de una represa que lo dejará bajo el agua que los lleva a caer en las garras de dos estafadores que les prometen un futuro glorioso y una eternidad celestial a cambio de todos sus ahorros. Si les suena de algo, no es pura casualidad. Lo malo es que ponen como antagonista a un borracho violento que no es mejor que los propios estafadores. O sea que aquí hay malos y peores o tontorrones.