Final Cut

Hace ya tiempo que vengo pensando que en la industria del cine todo el tema de los “remakes” se ha ido de las manos. Y que, si a veces pienso que tiene poco sentido hacer un remake de películas que tienen treinta o cuarenta años, menos sentido tiene aún hacer un remake sobre una película que tiene apenas cinco años. Y, lamentablemente, en los últimos tiempos esto ha ocurrido con excesiva frecuencia.
Pasó con “the upside” (remake de la francesa intocable, la cual os recomiendo muchísimo), ocurrió más tarde con el remake de la brillante “the guilty” (en España llamada culpable) por parte de Netflix y ocurre ahora con esta película llamada “¡Corten!”, que es la que nos ocupa, y que es otro remake de la brillantísima y muy original película japonesa “One cut of the dead” de 2017.
Puedo entender que se realicen adaptaciones de una historia a otras culturas distintas. De hecho, eso es lo que mejor hace la película que nos atañe a diferencia de las otras que he mencionado con anterioridad. Pero se me hace muy difícil pensar en la terrible crisis de ideas que estamos teniendo para que ya se vuelvan a rehacer películas que no tienen ni diez años.

En cualquier caso, “Corten!” que llegará a nuestros cines el cuatro de noviembre, es una película tremendamente divertida. No cabe duda de ello. Obviamente, cualquier mínimo atisbo de medir su originalidad queda completamente anulado desde el mismo momento en que decidieron crear una copia prácticamente plano a plano de la película japonesa. Pero, a pesar de todo ello, hay que reconocer que la cinta funciona perfectamente bien. Aunque el mérito no sea suyo, es obvio que consigue hacer reír y mucho. Yo, de hecho, me lo pasé francamente bien viendo la cinta. Pero no puedo evitar pensar que no hay ninguna necesidad de llevar a cabo estos productos.

Una vez aclarado lo anterior, vamos a hablar un poco de la cinta. La película arranca con la grabación de una película de zombis de serie Z. De hecho, cuando ves los primeros treinta minutos de la cinta, uno está pensando cómo se ha metido a ver algo así. Pero, una vez llegamos al final de los primeros treinta minutos (rodados en un plano secuencia francamente bonito e inmersivo), la película comienza un flashback y te explica como se ha llegado hasta ese rodaje y las cosas que están pasando entre bambalinas. Es en esa segunda mitad de la cinta donde todo funciona de maravilla y donde los espectadores (especialmente aquellos que no hayan visto la original) van a romper a reír a carcajadas en multitud de ocasiones.
Es obvio que esta cinta, además de estar muy bien interpretada (mejor que la original de largo), cuenta con muchos más medios que su predecesora y eso se hace palpable en todo momento. Tan palpable que uno se pregunta sino podrían haber intentado arriesgar bastante más y separarse del material original ya que estaban con todo ello.
Hay que decir, eso sí, que si realizan un esfuerzo por seguir siendo meta cinematográficos en sus propósitos hasta el punto que el propio guion es consciente de que es un remake. Y eso les permite crear algunas bromas sobre el hecho de que actores franceses estén actuando con nombres japoneses y cosas del estilo. No es mucho lo que se varía y explota este concepto, pero lo poco que se hace funciona.
Además, contar con la dirección de Michel Hazanavicius (ganador del Oscar por “The artist”) te da un evidente plus cualitativo ahí que no teníamos en la japonesa que no tenía apenas presupuesto para casi nada.

En definitiva, y por no extenderme mucho más. Creo que “Corten!” es una película muy divertida, francamente bien interpretada y cuya dirección y montaje destacan mucho en la segunda mitad de la película. Es evidente que me parece, a todas luces, innecesaria. Y también está claro que no es nada original. Pero creo que, a pesar de todas sus contraindicaciones, provocará risas y diversión entre la mayoría de espectadores. Especialmente entre los que lleguen a las salas sin haber visto su predecesora. La cual, en mi humilde opinión, merece mucho la pena.

Twitter: @QuiqueMartin27, colaborador de Mundoplustv

¿A ver… alguien ha visto la original "One cut of death"?!? Siempre Hazanavicius me ha parecido un director de comedia, no siempre buenas, pero destacaría las de OSS 117 como muy acertadas y mal genio como una sabrosa reflexión sobre Godard. Pero también mucha dudas sobre el éxito de una película come The Artist, multipremiada por esas ganas que la industria del cine, de vez en cuando, tiene al recordarse "fabrica de sueños", muchas veces baratos a mi parecer. Y este remake confirma esta dudas, donde la película Japonesa llevaba el cine de género Horror al mundo de Cassavetes, esta lleva directamente al mundo Disney. ¿De verdad la familia lo salva todo?!?

Los nervios del directo elevados a la enésima potencia. De esto trata, más o menos, este film que es un remake de la celebrada One Cut of the Dead (Shin'ichirô Ueda, 2017). Seguramente estaréis pensando que no hacía falta revisitar una obra difícilmente superable en cuanto a diversión y originalidad. Puede que tengáis razón pero ver una versión europeizada tiene su gracia o, como mínimo, provoca nuestra curiosidad.

Voy a abstraerme de hacer comparaciones y me centraré en hablar de Corten!, una cinta a la que le cuesta alcanzar el objetivo de divertir. Su primera media hora nos explica un streaming en directo con esa duración. A pesar de seguir una historia coherente, tiene detalles los cuales nos chocan. Diálogos absurdos, pausas incongruentes, actuaciones digamos que sospechosas. Esto es lo que vemos por delante, luego viene lo que pasa por detrás, emulando la famosa obra de teatro de Michel Fryan, Por Delante y por Detrás (Noises Off).

Todo se tuerce en el rodaje de una película de zombis de bajo presupuesto, que se transmite en directo en un canal de internet, cuando son atacados por zombis reales.

El director francés Michel Hazanavicius que ya nos sorprendió en 2011 con The Artist, película muda y rodada en blanco y negro, se mete de lleno en una loca comedia, lo que ya nos da una idea del atrevimiento de su director. Este cambio de registro en su filmografía es bastante curioso. Lo que no se le puede negar es el atrevimiento a la hora de rodar una cinta dentro de otra cinta. Metacine o como se llame. El tono jocoso y con un humor algo grueso justifica su acercamiento al mundo de los zombis. Eso le permite lanzar toda una serie de gags que, así de entrada, encajan perfectamente con lo que se nos quiere explicar aunque más de uno los considerará faltos de fuerza.

Seguro que en algún rodaje sucedan cosas inesperadas. Aquí no hay margen de error, es un plano secuencia y no se puede repetir nada. La manera con que se salvan esos inconvenientes es sumamente graciosa, provocando más de una carcajada.

El trabajo de cámara, a cargo de Jonathan Ricquebourg, es de destacar. Las carreras por interminables pasillos, los planos picados y contrapicados y los continuos movimientos de los actores hacen que se nos pongan los pelos de punta y que nos preguntemos cuantas veces se tuvo que repetir realmente alguna que otra escena. Seguramente Michel Hazanavicius no tiene la mala leche de su alter ego en el film. ¿O sí?

Las actuaciones actorales son muy correctas. Es una obra coral aportando cada intérprete el toque especial a su personaje. De todas maneras, y según nuestra opinión, destacar a Romain Duris que interpreta a un director algo pasado de vueltas. Le siguen Finnegan Oldfield, un actor que da vida a un zombi bastante revolucionario, Matilda Anna Ingrid Lutz (Revenge) algo así como una final girl y Bérénice Bejo (The Artist) la sufridora esposa del director.

Para acabar decir que Corten! es puro entretenimiento. Disfrutaréis de ella a pesar de venir de dónde viene. Da igual que hayáis visto la obra en que está basada. Aquí radica uno de sus logros. Hay que verla intentando evitar comparaciones.

https://www.terrorweekend.com/2022/10/corten-review.html

Cinco años después de la sorprendente, ingeniosa y divertidísima One Cut of the Dead llega este remake a la francesa que al igual que su fuente de inspiración goza de las mismas cualidades con una sustancial diferencia, la ausencia de originalidad. Y es que estamos ante un calco de la película japonesa alargado con algunos añadidos irrelevantes que lejos de aportar frescura hacen que el ritmo decaiga.

Eso no impide que se vea y entretenga con suma facilidad, y por supuesto si no has visto su antecesora seguro que te provocará las mismas sorprendentes sensaciones, pero para quienes tengan muy presente la original por desgracia no les aportará nada nuevo salvo pasar otra vez un buen rato rememorando una historia que nos encanta, lo cual no es poco.

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Partiendo de que ‘CORTEN! (Coupez!)’ es un “remake a la francesa” de ‘One Cut of The Dead’, película japonesa de Shinichirô Ueda, tratemos de hablar de ella como película propia que parte de una premisa donde la originalidad es, ya de por sí, cerca de lo impecable, como es la japonesa. ‘CORTEN! (Coupez!)’ está dirigida por Michel Hazanavicius y si bien su originalidad no puede ser catalogada como tal debido a que ese trabajo viene con antelación por parte de Ueda, se presenta ante el público como una de esas película que se tiene que intentar conseguir ver sin tomarla del todo en serio, buscando el disfrute más claro y directo en el espectador.

Una vez llegado a dicho punto, vemos en ‘CORTEN! (Coupez!)’ una película de zombies con diferentes películas dentro de sí, donde lo hilarante comienza desde el primer minuto y lo absurdo se va alimentando conforme va avanzando la obra. Con ese comienzo donde la cinta va creándose poco a poco y los ritmos narrativos de la misma comienzan a poner la máquina a trabajar ya vamos descubriendo que, si nos dejamos llevar e intentamos disfrutar de una manera saludable de la película, saldremos con una sonrisa de oreja a oreja. Gracias a sus efectos visuales enmarcados en la más divertida serie B y a un guion que se mueve por la delgada línea entre lo tontorrón y lo graciosísimo, ‘CORTEN! (Coupez!)’ es la perfecta coreografía para que se disfrute del baile.

En el acto de ser consecuente y hacer homenajes a la serie B, o directamente al cine de zombies como tal, ‘CORTEN! (Coupez!)’ ha sabido organizarse para darnos un producto en el que lo que va sucediendo en pantalla termina siendo un calentamiento magnífico para que el resultado del ejercicio final sea buenísimo. La fotografía y la mayoría de las veces que se utiliza de manera “artesanal”, permítaseme decir, son un reflejo de lo que finalmente se consigue explicar como magnífico trato de esa parte B del cine, donde se juega con todo lo que está en el poder de los protagonistas para que las carcajadas fluyan, que es lo que, al fin y al cabo, se esperaba y quería de ‘CORTEN! (Coupez!)’.

Las interpretaciones son gran parte del éxito que pueda cosechar ‘CORTEN! (Coupez!)’. Desde el punto de vista más personal, todos y cada uno de los personajes han hecho que consiga disfrutar y reírme de una manera intensa, ya sea por lo bien o mal que caigan o por las hilarantes situaciones en las que se encuentran inmersos dentro de la película. Pero más allá del disfrute zombie en general y de todo lo que acontece en ‘CORTEN! (Coupez!)’ tenemos una especie de homenaje de lo más cariñoso al acto de hacer cine, de crear películas y de lo que ha de ser convertir una idea en realidad; una especie de congregación de comentarios cariñosos hacia la figura del director, de la parte menos visible del cine y de las situaciones que se van enrareciendo dentro de un proyecto.

‘CORTEN! (Coupez!)’ es intensa, rápida y, en ocasiones tan estúpida que no puedes parar de reírte y disfrutar. Un remake que sirve de homenaje a tantas cosas que si la sabes disfrutar como corresponde, te hará pasarlo en grande.

Crítica para MagaZinema.
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