¿Me amarás cuando despiertes?

Parte de una situación actual, una situación a la que se ve sometida la mediana edad en su conjunto salvo afortunadas excepciones. Soledad, conformismo, insatisfacción; la vida se resume para muchos en un conjunto de actividades más o menos alienantes que realizamos sin motivación ninguna hasta que algo se cruza en nuestras vidas cual clavo ardiendo y nos agarramos a él como si fuésemos inmunes al fuego y dicho clavo fuese nuestra única tabla de salvación; y debajo el vacío de siempre, como para no aferrarse con uñas y dientes.
Es el caso de Isabelle Carré, nuestra protagonista, tan necesitada de cariño como de la chispa de la vida; un hecho fortuito le hace salir de su rutina. Quiere vencer sus miedos, sus inseguridades, vivir otra vida o ser la protagonista de la suya, harta, ya, de ser mera figurante en esta comedia que es la vida misma; quiere querer, ya sea a un perro o a un hombre en coma, ser querida, lo normal, vamos.
Todo ello tocado con humor y con algún que otro puntito relativamente divertido. No pintaba mal la cosa, pues.
El problema no es ya lo previsible que resulta cada escena, ni siquiera lo inverosímil de cada diálogo y de cada situación, ni tampoco que la empatía con los actores sea completamente inexistente; a pesar de todo eso se medio va dejando ver. El problema es el desenlace. En mi modesta opinión roza el patetismo. Todo bicho viviente sabe como va a terminar el mini film pero hacerlo de forma tan absurda y precipitada teniendo en cuenta los 80 minutos de duración, escapa completamente de mi razonamiento.
Buenas intenciones pero flojita.

Hay películas a las que no hay que pedir demasiado, siempre que no sean una bazofia de entrada. En esta película se agradecen las interpretaciones de Carré y de Maura, el planteamiento inicial, algunas que otra cosa simpática, como el perro, o el detalle con el ratoncito (para los que nos gustan los animales); en fin, entretiene.
No es profunda, no es cómica, se queda a mitad de camino, es previsible, pero la imprevisibilidad y los finales magníficos son rara avis, en el cine y en la narrativa en general. La vida, de por sí, para la mayoría de la gente, es muy previsible.

La idea de partida es atrayente y el don de la empatia que posee Isabelle Carré, esa Amy Adams francesa, hace que el asunto se siga con interés y con alguna que otra sonrisa, pero el desarrollo del guión escrito a dos manos por la propia directora y Michele Leclerc se enroca en si mismo y no progresa hacia un final a la altura de la propuesta. Marie Belhomme lo filma con soltura con un buen apoyo fotográfico de Penelope Pourriat.
Las gotas de soledad y patetismo que imprime Carré a su personaje dan mayor consistencia a un personaje que merecía mejor desarrollo. Carmen Maura se deja ver en un secundario episodico cuyo potencial Belhomme acaba desperdiciando, dando minutos a otra galería de personajes que no aportan demasiado.

Pues sí, la maravillosa actriz francesa Isabelle Carré nos trae a un personaje disparatado pero con la que no puedes más que sentirte identificada en ocasiones, una solitaria que sólo busca ser amada y que busca su lugar en el mundo, a la que la vida le da la oportunidad de conocer a un hombre en la piel del actor Phillippe Rebbot.

Yo conocía del buen hacer de la Carré en el cine dramático por su gran actuación el "Mi refugio", pro la francesa no lo hace nada mal cuando le toca un papel un pco más romántico y cercano. Es una actriz que siempre me recuerda físicamente a la gran Sissy Spacek y que me gusta mucho.

Junto a Carré podemos disfrutar de nuestra maravillosa Carmen Maura en un papel muy secundario del que no puede sacar más de lo que da.

El actor Phillippe Rebbot está correcto como el contrapunto de Carré.
Sencilla película francesa, ligera, corta, fácil de ver y muy bien interpretada por su actriz principal.
Un saludo,
Tess

No conocía esta cinta, así que tampoco había visto trailers, por lo que no tenía expectativas, lo cual a veces es muy bueno. Al principio del metraje, pensaba que vería algo similar a "Happy: Un cuento para la felicidad", pero no, nada que ver. En otro momento, la cinta me pareció que sería la típica película de profe sustituto/a, con problemas escolares, cosa que no desarrolla y me hubiera gustado ver más. Más adelanté pensaría que esta película tiene un enfoque similar con "Hable con ella", pero es obvio que no tienen nada que ver, eso sí, parece que sería la historia de Benigno, con muchos detalles cambiados.

La película se deja ver, además de que es algo corta.