The Face at the Window

Adaptación de la novela de Brooke Warren, con el algo excesivo Tod Slaughter como el Caballero Lucio del Gardo, hombre riquísimo que sin embargo lleva una vida criminal por las noches, robando y asesinando por doquier sin que la Policía sepa quién es en realidad.
La película es una obra menor pero simpática, no en vano, aunque se trata de una indudable serie C, está bien narrada y en sus apenas 70 minutos ofrece un apañado entretenimiento.
Tiene interés, aunque no sea porque mantiene hasta el final el misterio del terrible y monstruoso "rostro en la ventana " y no llega a aburrir nunca.
Los intérpretes, todavía tienen esa manera de interpretar del cine mudo, que lejos de molestar, resultan entrañables.
Bien en cuanto a fotografía e iluminación, con profusión de sombras que le otorgan al filme de un clímax de misterio y suspense logrados, aunque vista hoy en día resulte un tanto ajada.
Pero no está mal, mejor de lo esperado.

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En los años treinta, "Universal Pictures" estaba ocupada haciendo películas legendarias de monstruos como Drácula, Frankenstein y La momia que convertirían a estrellas como Bela Lugosi y Boris Karloff en nombres familiares. Por su parte, al otro lado del charco en Inglaterra, el productor y director George King estaba convirtiendo a otro actor en una estrella de terror: Tod Slaughter, un actor británico de origen teatral. En 1939, después de hacer un puñado de películas juntos, King y Slaughter cerraron la década con "The Face at the Window", melodrama de estilo victoriano con elementos de terror e incluso de ciencia ficción.

Basada en una obra de Brooke Warren (que había sido adaptada al cine tres veces antes), el guión escrito por Ronald Fayre y AR Rawlinson parece casi un precursor de las películas de serie B de ciencia ficción, en el que hay un triángulo amoroso, un asesino psicópata, un científico loco que experimenta con personas muertas y un pequeño giro final que mantiene el interés hasta el último momento. Todo bastante absurdo y muy teatralizante visto desde una perspectiva actual pero que, en su momento, tuvo gran repercusión en Gran Bretaña, sobre todo teniendo en cuenta que no era una producción de los estudios Universal, que en esa época acaparaban el género de terror.

"The Face at the Window" está concebida para el lucimiento del actor británico Tod Slaughter que aquí da vida al caballero Lucio del Gardo, un respetado aristócrata parisino de estilo victoriano que oculta una doble identidad. Al igual que en actuaciones anteriores, su interpretación resulta muy exagerada y teatral lo que unido a un guion con bastantes lagunas y a una producción de bajo presupuesto hace que el film no termine de destacar aunque, eso sí, resulte entretenido y mantenga el interés por el desenlace de la historia hasta el instante final.