Un bonito día de primavera

Renunciando al desarrollo tradicional de las historias románticas más comerciales (chico conoce a chica, se enamoran y, tras superar algunos impedimentos, acaban felizmente juntos), Un bonito día de primavera aborda la relación sentimental de sus dos protagonistas, un técnico de sonido y una locutora de radio, desde una posición nada convencional, la del desamor y el fin del romance. La situación planteada, siempre más desgarrada para aquel miembro que sale damnificado por la ruptura, es tan inusual en el celuloide como habitual en la vida real. Película delicada y verdadera.

La película es bastante lenta, la trama no tiene demasiados ingredientes, por lo que avanza muy despacio. Las actuaciones no me parecieron buenas y hay que ser buen actor para bordar estas películas intimistas, la dirección tampoco pareció ayudar mucho a los actores.

Buena ambientación, fotografía, y la profesión del protagonista muy curiosa y de acorde con los paisajes.