Haz click aquí para copiar la URL

Me enamoré de una bruja

Comedia. Romance Gillian Holroyd (Kim Novak), miembro de una saga de hechiceros, entre los que se encuentran su tía Queenie (Elsa Lanchester) y su hermano Nicky (Jack Lemmon), se enamora locamente de un famoso editor, Sheperd Henderson (James Stewart), que está a punto de contraer matrimonio. La joven bruja no duda en utilizar uno de sus conjuros para conseguir que Sheperd deje a su prometida y se rinda a sus encantos. Todo sale según lo previsto pero, ... [+]
1 2 3 4 5 >>
Críticas 24
Críticas ordenadas por utilidad
16 de diciembre de 2008
36 de 38 usuarios han encontrado esta crítica útil
Una de las mejores comedias de Richard Quine. El guión, de David Taradash (“Encubridora”, Ray, 1952), adapta la comedia de Broadway “Bell, Book and Candle” (1950), de John Van Druten. Se rueda en exteriores de NYC y en los platós de Columbia Pictures Studios (Hollywood). Es nominado a dos Oscar (dirección artística y vestuario). Producido por Julian Blaustein (“Flecha rota”, Daves, 1950) para Columbia, se estrena el 19-XII-1958 (Finlandia).

La acción dramática tiene lugar en Greenwich Village (NYC), en 1958. El editor Shepherd “Shep” Henderson (Stewart),, enamorado de Merle Kittridge (Rule) y a punto de casarse con ella, conoce en Navidad a su vecina Gillian “Gill” Holroyd (Novak), bruja residente en NYC, de una saga familiar que incluye a su tía Queenie (Manchester) y a su hermano Nicky (Lemmon). Gill es joven, atractiva, sexy, solitaria, de mirada felina e hipnóptica. Busca algo excitante para distraer su aburrimiento. Regenta una tienda de antigüedades y de objetos singulares (flores marinas). Shep es apuesto, respetable, ingenuo y encantador. La tía es fisgona, chismosa, entrometida, manipuladora y adorable.

El film suma comedia, romance y fantasía. Desarrolla una trama sencilla, clara y sugerente, que mantiene la sonrisa en los labios del espectador. El relato, elegante y sofisticado, no busca la carcajada en aras de un tono equilibrado y contenido, que traspira clasicismo y buen gusto. El resultado es una comedia entretenida, inspirada y mesurada, que focaliza la atención en un relato exótico, de brujas y hechiceros, que desconfían del amor porque puede privarles de sus poderes sobrenaturales. El título original se traduce literalmente por “Campana, libro y vela”. Hace referencia a la campanilla del gato Pyewaket, al libro “Magic in Mexico” de Sidney Redlitch (Kovacs) y a la vela que acompaña a la melancolía de la bruja Gill.

La cinta recoge la segunda colaboración estelar de James Stewart y Kim Novak. Pocos meses antes habían participado en “Vértigo”, de Hitchcock, en registros opuestos a los de ésta. Durante el rodaje Stewart cumple los 50 años y decide no volver a encarnar papeles de galán romántico. Kim Novak, Jack Lemmon y Ernie Kovacs, a raíz del film, se convierten en actores habituales de Quine. Novak había trabajado antes con Quine (“La casa 322”, 1954). Después colaborarían de nuevo en “Un extraño en mi vida” (1960) y “La misteriosa dama de negro” (1966).

Son escenas memorables la del encantamiento a cargo de Gill acompañada de Pyewaket, el sombrero lanzado desde lo alto de un rascacielos (Flatiron Building), el encuentro inesperado de Shep y la tía en el domicilio de él y otras. La obra inspiró la serie de TV “Embrujada”.

(Sigue en el spoiler sin desvelar partes del argumento)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Miquel
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
11 de mayo de 2012
24 de 24 usuarios han encontrado esta crítica útil
Ya puede ir Jack Lemmon por ahí haciendo travesuras, rompiendo farolas o cosa similares, ya puede quien quiera dejar el mundo a oscuras, anular la luna, eclipsar el sol, lo que sea, de pronto aparecerá Kim Novak y todo se iluminará en torno a ella, la luz brotará con inusitada fuerza, esa cara perfecta, esos ojos que hipnotizan, de un color imposible. Ese cuerpo, de curvas marcadas, en sus justas proporciones, dulzura, picardía, fuego. Su filmografía tal vez no, pero su físico está a la altura de las divas. Ava, Marilyn, Ingrid, no tiene nada que envidiarlas, desprende erotismo y picardía como Marilyn, arrebato y pasión como Ava, serenidad y delicadeza como Ingrid. Reúne a las tres en una. Kim es única.
En esta película, con el gato, o sin él, descalza o con zapatos, de mujer o de bruja, sola o con Stewart, ella se lleva la palma, ella es la película, espectacular, excepcional, sensacional, esplendida, magnifica, excelente, grandiosa, se me agotan los adjetivos, su belleza es insultante, hay momentos en que puede dañar la vista, es sin duda un peligro para los espectadores, pero quien puede resistirse a admirarla, y después de verla a ella, que otra mujer nos podría enamorar. Podríamos vivir una eternidad envueltos en su recuerdo, olvidándonos por completo del resto del universo.
Al margen de Kim la cinta tiene algún momento de auténtica magia, y personajes secundarios pintorescos y potentes, el escritor, la tía, el hermano, con sus excelentes protagonistas, quizás lo que cuela menos es la notable diferencia de edad que tenían cuando la rodaron Stewart ya cincuenta y Novak veinte y cinco, es mucha la diferencia y se nota demasiado en la pantalla. Pero bueno haciendo un pequeño esfuerzo y obviando ese detalle, lo demás es una delicia. Kim brilla en su esplendor, nos mira, hace una mueca, deja escapar una lágrima, y ya todo da lo mismo, después de estar cien minutos con ella el mundo se puede acabar y no pasaría nada, a quien ya le importaría.
picais
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
18 de noviembre de 2007
18 de 22 usuarios han encontrado esta crítica útil
Película muy entretenida para pasar el rato entre magia, hechizos y amores. Ambos protagonistas pasan con nota sus interpretaciones, no obstante, estamos hablando de dos grandes del cine clásico y la verdad es que tampoco debieron esforzarse mucho para que la película resultara. La trama es sencilla (que no simple) y graciosa. Lemon no tiene mucho protagonismo y el personaje de la tía me pareció algo estridente aunque lo más seguro es que se deba al doblaje.

La película no es de las mejores de sus protagonistas, ni mucho menos de la éoca dorada de los 50, pero es perfecta como comedia romántica de cierta calidad para pasar un rato agradable. Los que opten por esta película no lo lamentarán, ya que si tenemos que elegir entre las comedias románticas de hoy día es difícil encontrar algo medianamente en condiciones, pues a mi juicio, abunda la poca originalidad y el sentimentalismo barato.

A destacar la pegadiza banda sonora, la obediencia del gato, la espalda descubierta de Novak y las muecas de Steward.

Saludos.
Ana Cervantes
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
13 de mayo de 2012
15 de 16 usuarios han encontrado esta crítica útil
Una entretenida comedia, basada en una obra de teatro de John Van Druten, con unos diálogos ágiles y divertidos y en la que una guapa kim Novak, la hechicera más seductora de Greenwich Village, al descubrir que su nuevo vecino, el atractivo editor Shep Henderson (James Stewart) es el novio de una antigua rival de la universidad, no duda en embrujarle para que se enamore de ella.Todo sale según lo previsto, pero...

Kim Novak y James Stewart se volvieron a reunir en esta película justo después de haber rodado el clásico de Hitchcock Vértigo (De entre los muertos). James Stewart, deja ver, una vez más, lo grande que era interpretando. Siempre representó a hombres corrientes, tipos sencillos a los que les sucedían cosas. Fue un héroe cotidiano. Tal vez esa fue la clave de su éxito... El genial Jack Lemmon ejerciendo de simpático secundario, interpretó aquí uno de sus primeros papeles. Kim Novak como siempre tremendamente guapa y seductora.

Aunque no es una obra maestra, si es una entretenida película, especialmente recomendable para cualquier fan de Stewart o los seguidores de las comedias románticas.
Juan Marey
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
27 de julio de 2012
11 de 13 usuarios han encontrado esta crítica útil
Un editor, a punto de contraer matrimonio con su novia de siempre, conoce a una enigmática y misteriosa mujer por la que se sentirá repentinamente atraído de manera un tanto 'extraña'.
Quine, director atípico pero sin nada reseñable en su obra, no supo aprovechar esta atractiva y llamativa historia quizás obsesionado por ofrecernos los planos más sensuales y sugerentes de Kim Novak. La película carece de ritmo y, lo que es peor, carece de 'antecedente', es decir, Quine debe pensar que conocemos a los personajes de toda la vida. Pero no es así, y, sobre todo, al comienzo de la película permanecemos absolutamente desconcertados.
Sí hay que alabar empero las notables interpretaciones de protagonistas y secundarios, los hermosos planos de Kim Novak y una fotografía mágica y prodigiosa que alcanza su súmmum en los rostros de los clientes del "Zodiaco".
el chulucu
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
1 2 3 4 5 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow