Masacre sangrienta

Robert Hall conocido por maquillador en varias producciones como «Teen wolf» (serie de TV) o «Superfumados» dirige y coescribe guion —la primera fue dirigida y escrita exclusivamente por él— de «ChromeSkull: laid to rest 2», una película en la que ChromeSkull intentará seguir haciendo de las suyas con ayuda de una especie de organización mientras un detective intentará pararle los pies. Entre los actores tenemos a Brian Austin Green de «Sensación de vivir» o «Domino» que interpreta a Preston; a Thomas Dekker de «Pesadilla en Elm Street» o «Kaboom» además de dirigir y escribir «Jack goes home» que interpreta a Tommy; o a Danille Harris de la saga «Hatchet» que interpreta a Spann.

Se trata de una película de terror con elementos de misterio, suspense y si no recuerdo mal algo gore en la que sinceramente todo es muy confuso pero no dejó de entretenerme durante lo poco que dura, escasa hora y media. Si tuviera que explicar qué pasa en la película ahora mismo y después de unos días de haberla visto no sabría resumirla exactamente pero si sé una cosa, estoy seguro de que la primera va a caer porque de alguna manera es diferente a algunas del estilo que he visto. Para empezar su asesino que va cámara al hombro matando a todos.

Los actores están bien, Thomas Dekker se está convirtiendo en uno de mis favoritos después de saber qué puede hacer como director y a Danielle la conocía junto a Brian Austin, a este tampoco la edad le sentó demasiado mal de entre los actores de «Sensación de vivir».

No tiene metascore ni tomatá pero en este último sitio tiene dos críticas positivas que dicen que es loca y justo por lo que se ven las películas «slasher» o que sin reinventar nada se deja ver. Pues eso, no es nada especial pero tiene un toque diferente que la hace pasable a la vista y además te deja con ganas de ver la primera porque según dicen, aunque no siempre es así, segundas partes nunca fueron buenas.

En ésta consiguen algo inesperado y es ser mejor que la primera, supongo que dejaron el listón bajo y creo que de aquí que esta me haya impresionado más.

Los actores en esta parte están mejor escogidos y ofrecen algo mejor que los de la primera parte pues eran nefastos (como escribí en la reseña de la primera), aquí al menos se lo curran. El argumento está mejor llevado y es algo más interesante que su primera parte aunque deja algunas incógnitas que no tienen respuesta y cabos sueltos (entro en más detalles en la zona spoiler).

Aquí los efectos prácticos suben un escalón en calidad y son bastante increíbles, no hay mucha información pero se nota que son películas de bajo presupuesto y es de agradecer que nos den sorpresas como estas con un dinero apretado. El villano principal aquí es más imponente que en la anterior, restando un poco su torpeza para darnos a alguien más apabullante.

He leído que quisieron (y aún siguen intentando) conseguir financiación para una tercera parte que parece ser que no llegará pues no han llegado a la meta que se propusieron, no estaría mal ver una trilogía del asesino que se han montado.

Secuela del decente slasher Laid to Rest (2009), que esta dirigida por el mismo director que la primera entrega, el cual también ha dirigido otras películas como Fear Clinic (2014). La película está protagonizada por Nick Principe (Sky Sharks, 2020), y Thomas Dekker (Enter the Dangerous Mind, 2013).

Tommy, quién sigue luchando por comprender las razones de su encuentro con el asesino enmascarado, ahora ha desaparecido por cortesía de Preston, un misterioso personaje con una siniestra conexión con ChromeSkull. Mientras tanto, nuestro querido asesino de la cámara de vídeo en el hombro, ha puesto sus ojos sobre una nueva víctima, Jess, una joven recientemente desaparecida. El detective King iniciará una carrera contrareloj para encontrar a la chica y a Tommy antes de que sea demasiado tarde… y de paso intentará poner fin al legado de muerte de ChromeSkull.(FilmAffinity)

Esta segunda entrega resulta totalmente continuista respecto a la entrega original, alargando la historia del asesino en serie que da nombre a la película de forma inverosímil, pero que no desentona con el espíritu desenfadado y serie B de la película. Por lo demás, Chromeskull ofrece exactamente lo que uno espera cuando va a verla, muertes con una buena dosis de sangre y vísceras, efectos prácticos resultones y unas actuaciones bastante malas. En la trama se añaden ciertos personajes que aportan a la mitología del personaje de Chromeskull cierto toque sectario, ademas de contar con la siempre agradable participación de Danielle Harris (Halloween 4: El Regreso de Michael Myers, 1988).

Esta segunda entrega no innova prácticamente en nada, aunque no por esto deje de ser tan entretenida como resultó la película original, ofreciendo una alta dosis de sangre que mantendrá pegado a la pantalla al fan del cine de serie b, y un argumento simplón que consigue que la pelicula llegue al estatus de placer culpable.

Nota personal: 5/10

La película que nos ocupa viene a demostrar que cualquier subproducto de terror puede contar con su propia secuela. La historia continúa prácticamente donde lo dejó la anterior entrega y nos muestra que el asesino enmascarado (Nick Principe) no está muerto. Tommy (Thomas Dekker), uno de los supervivientes de la primera parte, y Jess (Mimi Michaels), una chica que está perdiendo la vista, serán sus nuevas víctimas.

Cercana en intenciones a trabajos como Saw, la película de Robert Hall no es sino otro subproducto gore del montón. Y lo que es peor, sin un guión que sostenga la sucesión de cortes y desmembramientos que se acumulan a lo largo de su hora y media de duración (¿por qué narices no explican prácticamente nada de la extraña sociedad que capitanea el asesino?). Como curiosidad señalar que Danielle Harris, actriz muy apreciada por los fans del género, y Brian Austin Green, famoso gracias a la serie Sensación de vivir (Beverly Hills, 90210), también participan en la cinta.