No he leído el libro, por lo tanto me considero objetivo a la hora de juzgar esta película. A la conclusión a la que he llegado viéndola es que el director que la ha hecho no tiene ni idea de dirigir, ni de montaje, ni de dirección de actores. Cuando la mayoría de la gente en la sala a la que fui, no se enteraron de nada de la trama (y las diez mil subtramas), es que algo falla. Y punto.

Sin duda la película tiene sus grandes momentos y escenas de cine de calidad, pero creo que no sería lo mismo sin Don Robert De Niro, el mejor actor norteamericano de la historia. Una soberbia interpretación en una hiperrealista película, que nos describe tal como somos, sin hipocresías y falsedades. Va directa a tu mente.

La película es del montón. Típico tío calzonazos, que es muy buen novio, pero que sin embargo, carece de colegas al tener poca empatía machotil (sí, sí, de machotes, como debe ser). Lo más interesante es que sale el actor que interpreta a Marschall en la serie: "Cómo conocí a vuestra madre", y te ríes con su personaje en el film.
Pero, mención aparte merece una diosa del celuloide, de la cual he quedado enamorado: Rashida Jones. De gran parecido a una ex mía (la conocida Raquel Navamuel), Rashida posee una belleza que me encanta. Me deja atontado mirándola a la pantalla. Así pues, apruebo a la peli principalmente por ella.

Tengo que decir que la primera hora de película me pareció fascinante, sublime. Pero poco a poco la trama se va haciendo más pastel y termina por perder algo de interés y se convierte en una película un poco flipante. Aún así merece mucho la pena verla.

P.D.: No apta para nenazas

Si no han visto esta película, por favor, no la vean. Es tan absurda que degrada el nombre de la sociedad española fuera de nuestras fronteras. Reconozco que España no tiene mucho que ofrecer fuera, pero lo que no puedo consentir es que a semejante "personaje" se le considere un genio. Almodóvar, cámbiate de sexo, vete a vivir a Francia y déjanos en paz a nosotros y a nuestros impuestos.