Escenas ridículas como la del holandés que mata al otro por blasfemar. Que le sea tan fácil a la chica llegar tan alto, que la resistencia sea tan tonta y caiga en propias trampas, ese prólogo que no aporta más que falta de tensión por saber si la chica morirá (a ella le da igual que maten a su amigo del barco, a sus padres y hermano, etc).
Se salva el baño de mierda , la falsa erección de Tom Hoffman y el teñido del pubis, es decir, Verhoeven debería hacer porno con clase. El resto no nos interesa.

si realmente es gay, porqué macDormand no se lava el pelo, porque es tan tonta Anniston en su relación con Scott caan, tan lista en su relación con el último novio que se echa, tan poco denunciada por la pareja que acosa por teléfono, tan egoista y manipuladora con la Cusack cuando le pide dinero, porqué no vemos un plano de la casa de Keener sin el segundo piso, etc

Yo no tenía edad de tener el "síndrome de Rebeca"- que más bien sería el de la segunda sra de Winters- pero luego lo tuve, gracias a Rebeca. Y digo gracias porque explicó un sentimiento, no solamente a una chaquetilla que uno se pone por encima cuando va haciendo frío.

Yo reniego de la teoría de amor lésbico de la Sra Danvers. La entiendo. Rebeca era fantástica. Y más bien veo una fantasía de Daphne du Maurier con el incesto: la figura paterna que representa Olivier, el primito con el que se acuesta Rebeca...


Por cada vez que se quema Manderley- que sufro mucho-, vuelves a a verla y ahí está. Y me sigue sorprendiendo cada escena, y espero que no pase esto o lo otro, o que pase. Da igual que te la cuenten, te va a sorprender igual.

¡Ah! y la mala, se pongan como se pongan, no es el ama de llaves, sino la Sra Van Hopper de los cataplines.

Me gusta mucho que Freud paseé por Barcelona, pero no que se metan con calzador referencias a Franco, a las Bronte, al Titanic, etc..Poco y mal desarrollada la historia paralela del rey Alfonso XIII, que habría dado más juego.
Leonor Watling está guapísima vestida como la baronesa de Memorias de Africa y Luis Tosar me parece poco creible despues de haberle visto el pene en "te doy mis ojos", por cierto, ese pene es el auténtico macguffin del guión.
Mercedes Sampietro está exagerada y no me hacen gracia las bromas con los alcohólicos que beben colonia (¿por qué la nominaron al Goya?¿por ser la presidenta?). Juanjo Puigcorbé más exagerado, y debo decir que me daba muy joven para el papel de padre.