Tengo ciertos sentimientos encontrados con The Devil's Candy.

Por un lado la cinta está rodada de forma fantástica. Buena fotografía, ESPECTACULAR trabajo de sonido; unas interpretaciones más que decentes, sobretodo de la de Pruitt Taylor Vince (y he de reconocer que Ethan Embry intentando hacer de tio malote tiene gracia, aunque para mís siempre será Preston en Ya no puedo esperar más); tiene más de algún momento creepy y además se proponen temás MUY interesantes...

...que por desgracia apenas se exploran. Toda esa idea detrás de la conexión entre el mal y el espíritu roto y profundo del arista es una idea genial que no se trata en absoluto; todo el tema de la música metal se queda más como una pegatina que queda genial en la portada de la película; la idea de los sacrificios para poder progresar como artista, etc etc.

Y esto hace que la cinta se me antoje algo pobre y simple al final. Planta buenas semillas pero no las deja germinar y termina de forma abrupta y seca.

Una pena, porque podría haber estado bastante alta en mi ranking de 2017...