Bobby es una sencilla película que habla sobre la ilusión y la esperanza, pero también sobre la pérdida de estos valores y otros muchos. Tomando como base las relaciones entre algunas de las personas que se encontraban en el Hotel donde en 1968 fué asesinado Robert F. Kennedy, Bobby habla sobre algunos de los temas que, trístemente, son intemporales. La diferencia de razas, la pérdida de libertades, el terrorismo, el alcoholismo, la pérdida de la juventud, los prejuicios raciales, la mentira, las enfermedades mentales... son alguno de los temas sociales y morales que trata Bobby, pero lo que podría ser un auténtico exceso de tragedias se conforma como una sencilla y sincera historia que habla de grandes acontecimientos con diminutivos que lo acercan a algo comprensible para todo aquél que quiera ver cuanto o tan poco haya cambiado el mundo en estos treinta años. La figura de Bobby se usa asímismo como símbolo de lo que pudo ser América y no fué, y los problemas y dolores de aquella época se extrapolan a los tanto o más turbulentos momentos políticos de nuestra era. La fuerza de Bobby está en la sorprendente humildad con la que el actor y director Emilio Estevez trata sus personajes, sus historias y la historia misma. Su elección de la música y su uso del montaje (en el que intercala discursos de Kennedy e imágenes de archivo) acompaña a las piedras angulares de la cinta: sus actores, tratados con el mismo cariño y humildad que toda la película, que consiguen contar todas sus historias en los breves minutos que aparecen en pantalla, construyendo un verdadero entrelazado de vidas que lejos de ser un nudo incomprensible es una acertada disección de nuestra sociedad, de nuestras vidas y nuestros anhelos, de nuestro papel en el mundo y de lo que el mundo significa para nosotros.
Bobby es una excelente y recomendable película y no quisiera acabar mi crítica sin destacar los puntos cumbres en cuanto a interpretaciones se refiere: Helen Hunt y Martin Sheen conversando; Linsday Lohan y Elijah Wood en su boda; Sharon Stone y Demi Moore preparándo a esta para la noche; Heather Graham llegando a su trabajo; Anthony Hopkins recibiendo a Bobby... y ese impresionante final...