Haz click aquí para copiar la URL
España España · Huelva
Voto de theo56:
8
Drama “Monstruo” es lo que el abogado de la acusación llama al joven de 17 años Steve Harmon, un brillante estudiante de Harlem y aspirante a director de cine. Acusado de asesinato por un crimen que él asegura no haber cometido, la historia se centra en la compleja batalla legal que determinará si pasa el resto de su vida en la cárcel. (FILMAFFINITY)
13 de mayo de 2021
5 de 9 usuarios han encontrado esta crítica útil
Más que una crítica, me gustaría aportar una reflexión (sin spoilers)

Steve Harmon (Kelvin Harrison Jr.) es un aspirante a cineasta, de familia acomodada y con futuro, pero acaba siendo encarcelado por un crimen. La película aborda sus contactos, juicio y experiencias en un crimen que demuestra lo defectuoso de un sistema judicial arbitrario e injusto.

La sociedad punitiva en la que vivimos no salva a nadie, pero acaba poniendo más peso sobre las clases bajas y el lumpen. Steve no es lumpen, ni clase baja, es de una familia con estables ingresos económicos, burguesa, e incluso con toques clasistas. Esto no es óbice para que no sufra de la mirada racista de un sistema judicial creado por los de arriba y para la tortura del pueblo africano residente en Estados Unidos.

El punitivismo se basa en el castigo prejuicioso, la condena en firme sin pruebas concluyentes y el olvido del perdón por el crimen. En una sociedad punitivista no existe el perdón y no existen los grises: se es criminal o no se es.

¿Para qué sirven las leyes, juicios, jueces y cárceles? ¿Para castigar o para reinsertar? ¿Para mostrar errores, para hacer pedagogía de la buena conducta (o de lo que consideramos “buena conducta”) o para encerrar y achacar las actitudes reprochables a la naturaleza malvada del ser? Monster muestra que un cambio es necesario, no solo en Estados Unidos, sino en todas nuestras sociedades modernas. Explicamos los crímenes hablando de que los individuos son malos por naturaleza, pero actuamos con maldad al encerrarlos sin ofrecer perdón. No queremos un mundo mejor, no buscamos entender las razones de un crimen: queremos apartar la mirada, vivir cómodamente bañadxs en nuestros privilegios.

No es la mejor película para hacer un análisis de clase sobre el punitivismo que sufre el pueblo africano de Estados Unidos o explicar el crimen y su intrínseca relación con la inestabilidad económica de los barrios obreros, para eso ya está Spike Lee y su maravillosa filmografía. Esta película nos ofrece un análisis distinto, pero también necesario, complejo y más compacto en una película corta y directa gracias a la voz en off.
theo56
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow