Alguien dice en un momento de la película que “los sentimientos absolutos solo son ilusiones de los jóvenes” y sobre esta premisa se desarrolla una hermosa película, muy al estilo italiano. El cariño del alumno por el profesor, el afecto del profesor por el alumno, la amistad, las relaciones familiares en una sociedad rural donde la soledad es más marcada, el sentimiento de lo bello interior. Son un montón de aspectos que se despiertan los mismos sentimientos en el espectador gracias a la sensibilidad del director que busca las imágenes adecuadas en las situaciones idóneas para contarnos la historia. Quizás otro director más experto en la utilización de la imagen le hubiera sacado más partido a este guión. También con más recursos se podrían haber corregido ciertos aspectos de fotografía que desmerecen en la belleza de las situaciones y en la profundidad de sus significados. No llega a ser una película redonda porque deja sin explicación algunas situaciones importantes y las reacciones de los personajes en estas y otras situaciones. De todas formas son sentimientos lo que principalmente muestra esta película y muchas veces los sentimientos no son fáciles de explicar.