Interesante thriller que viene firmado por un director que lleva una carrera interesante con películas como la magnífica “El maquinista” o la no tanto “Transsiberian”.
Se trata de una película con una trama sencilla, sin muchos alardes y con muy pocos efectos imposibles de guión que busquen la sorpresa, lo cual es de agradecer. Un film sobrio, que no se alarga más de la cuenta y que, por lo menos a mí, da una buena dosis de mal rollo. En este sentido, es obvia la influencia que ha ejercido sobre el director alguna de las grandes obras maestras que nos ha dado el cine de psicópatas, pero es normal y no hay que verlo necesariamente como algo negativo.
La trama, como decíamos anteriormente, es sencilla: una muchacha que trabaja en el 911 (emergencias) recibe una llamada de una muchacha que se enfrenta a un extraño que ha entrado en su casa. Años después, recibe otra llamada de otra chica que está siendo raptada y la protagonista hará todo lo que esté en su mano para salvarla. Si no tenemos muy en cuenta la terrible coincidencia en la que se basa el argumento del film (no hay forma de que te coja dos veces el mismo teleoperador de una compañía el teléfono el mismo día y la operadora de emergencias se topa dos veces con la misma situación), ya digo, la película no está mal.
El reparto hace bien su trabajo: Halle Berry es una gran actriz aunque esté últimamente algo perdida y Abigail Breslin hace un gran trabajo. El que se pasa un poco de la raya quizás es el que hace el papel de malo y del que no recuerdo el nombre.