Keanu Reeves protagoniza una película que ya has visto sin haberla visto. "Dueños de la calle" es la historia de un policía que forma parte de una unidad que no juega limpio. Aunque atrapan a los malos, modifican los hechos para benificiarse. Los acontecimientos llevan a Tom Ludlow (Reeves) a meterse de lleno en una historia de conspiración y corrupción.

El guión no es que sea malo, ni mucho menos, sólo que es un calco al de películas del mismo estilo. Los amagos de giros de guión no sorprenden porque estamos ya inmunizados. Desgraciadamente, a mí me recuerda demasiado a "Training Day" y no tenia muchas ganas de ver la película otra vez.

En definitiva, "Dueños de la calle" no es una película mala, está dirigida con corrección y tiene un buen elenco de actores (Keanu "Neo" Reeves, Hugh "House" Laurie, Chris "Antorcha" Evans...), pero no sorprende ni en los créditos y eso le resta mucho.