Seré muy breve en esta reseña, no por la falta de calidad del film implícita --que no sería cierto--, sino porque derivaría hacia una repetición vana de las de otros compañeros críticos.

Con una trama nada original, personajes comunes al de otros films de su género particular (thriller de secuestro domiciliario), un Harrison Ford algo acartonado en su actuación y personajes, en general, carentes de psicología, la película, sin embargo, tiene toques, e incluso ciertos momentos, de inquietud y de suspense, de buena diversión y de interés.

Entretenida.