Pese a los pocos medios, Consigue una ópera prima singular. Gracias a un montaje brillante, Tarantino nos cuenta mediante flash backs, un atraco a una joyería realizado por seis tipos que antes no se conocían entre sí. Algo sale mal y sospechan que uno de ellos es un policía infiltrado.
Con una estructura singular nos dice que algo ha salido mal en el atraco, para después seguir los pasos de cada uno de los seis atracadores, cómo se involucraron en el golpe y a través de cada uno de ellos nos explica como tuvo lugar el atraco. Para finalmente, volviendo al presente, darnos un final apoteósico.

Ya se ven aquí las huellas del cine de Tarantino. La elección de la banda sonora, las actuaciones corales donde ningún personaje importa más que el resto, el humor negro, la violencia, los largos planos donde los diálogos inteligentes son el auténtico protagonista.
Viendo su progresión, no creo que la película merezca más de un ocho, porque la misma estructura de "Reservoir dogs" la hemos visto después en sus cintas posteriores, pero con mayor madurez, siempre fiel a su estilo visual inconfundible.
Tarantino comprende la importancia que tiene el guión en el cine. Que él decida escribir sus propios guiones, la libertad que eso le da cuando se pone detrás de la cámara y ya sabe lo que quiere y espera de sus actores. Por desgracia pocos directores actuales han sabido seguir sus pasos, más pendientes de fuegos artificiales.