Tan solo con ver el cartel ya no podria ser una mala película, con semejante reparto agrupando a los actores de máximo prestigio, pero es que cada actor está perfecto en su papel. La película mantiene al espectador enganchado a la pantalla y se sumerge en el mundo que Scorsese nos plantea: Una sociedad donde la mafia nuevamente lo controla todo y los cabecillas de estos grupos mafiosos son perseguidos por la policia estatal. Hasta ahí todo parece seguir un curso normal pero la manera en la que el director desarrolla el argumento nos mantiene en constante tensión con geniales escenas llenas de acción y con unos diálogos magistrales dignos de una película de este tipo. Los numerosos giros o cambios de tuerca hacen que la película llegue a impactar y a la vez sorprender ganandose asi la atención del espectador de forma aplastante. Maravillosa película, así da gusto ir al cine.