Es tan rudimentaria que creo que no se podría haber hecho mejor, es genial; los actores sobreactuando, exagerando las muertes, despertando de golpe, un ladrón que se queda atrás por que se cae pero la cámara sigue rodando, una persecución que con sólo una escena se iguala a cualquiera; y un muñeco lanzado por el tren millones de veces repetido a lo largo de la historia del cine; y como no, con un final espectacular y provocador. Pero todos estos errores no la hacen peor, al contrario, le dan un toque precioso, encantador hacia el espectador. Nadie nace aprendido.

Dr. Hackenbush.

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