Película sobre la mafia que está muy condicionada por el año de su estreno, 1973, año posterior a "El Padrino" y anterior de "El Padrino parte II". El comienzo nos hace presagiar una gran película, pero el conjunto le hace rebajar varios peldaños. Los desarrollos de algunos personajes y los giros de la trama resultan, a veces, poco fluidos y algo impostados. Anthony Quinn cumple y se le añora en algunos tramos de la cinta, mientras que Frederick Forrest y Robert Forster están faltos de algo, llamémosle carisma, para crear unos sólidos personajes que empaticen con el espectador. Es una interesante cinta, pero las comparaciones con un género que cuenta con muchas obras de arte la hace una cinta menor.