169/04(04/10/19) Interesante, muchos puntos atractivos, también con varios valles (comienzo demasiado artificioso, y final atropellado), drama romántico realizado por Mitchell Leisen, aborda la historia de un playboy rumano que intenta entrar a USA desde México y se encuentra con impedimento de cuotas. La historia proviene del libro semi-autobiográfico de la estadounidense Ketti Frings, “Memo to a Movie Producer” (1940), inspirada en su esposo Kurt, refugiado llegó a América casándose con ella, su matrimonio se disolvería en 1963, tras 24 años de convivencia. Fue adaptada por el mítico Billy Wilder (habla de algo él tan bien conocía, ser emigrante en USA) y el luego compañero guionista en muchas de sus direcciones Charles Brackett (“Sunset Boulevard”), siendo la última vez que Wilder dejaría alguien más se apoderara de su trabajo, la colaboración de los dos guionistas con Leisen (realizaron con este tres films) concluye con este film a raíz de la supresión por el realizador de una escena tragicómica, y es que Wilder afirmó que nunca estuvo contento con la forma en que se adaptó su guión, por ejemplo, Wilder escribió una escena en que Charles Boyer, debía entregar un monólogo a una cucaracha. Boyer sintió la escena era ridícula y el director de la película, no la filmó. Wilder declaró que nunca más permitiría que ninguno de sus guiones fuera filmado por nadie más que él. Ello en un relato que comienza como meta-cine al ser el grueso del al historia un flashback contado por el protagonista a un director de cine (el propio Leisen) en un estudio de cine durante una parada en el rodaje de una película (“Vuelo de águilas” de 1941, protagonizada por Verónica Lake y Brian Donlevy). Charles Boyer encarna con su habitual elegancia al gentleman, Paulette Godard está radiante como la busca-fortunas, pero la que arrolla con su luz bondadosa e ingenua es una Olivia de Havilland sensacional, derrochando ternura. Por sus esfuerzos, Olivia de Havilland fue nominada para el Oscar a la Mejor Actriz, perdió frente su hermana menor Joan Fontaine por “Suspect” de Alfred Hitchcock, cinco años después, de Havilland ganaría un Oscar por otra película de Mitchell Leisen, To Each His Own. Film nominado a los Oscar a Película, el mencionado Actriz Principal, Escritura- Guión, Dirección de Arte-Decoración Interior-Blanco y Negro, Fotografía-Blanco y Negro, y Música-puntuación de una imagen dramática .

La cinta hay que verla en su contexto temporal, cuando el film se estrenó (dos meses antes del ataque nipón a Pearl Harbor) en Europa llevaban más de dos años de la WWII, USA seguía política de aislacionismo, no queriendo entrar en conflicto bélico, es por ello una película propagandística donde queda un subtexto sobre el Sueño Americano, los inmigrantes son vistos con recelo y paranoia por estadounidenses, ejemplificado esto en el comentario que Emmy hace a Georges sobre lo que le ha dicho un familiar, de que su marido extranjero puede ser un criminal por que no es de raíz norteamericana, esto solo es algo superficial en la película; Estos emigrantes esperan entrar por el contrario son más patriotas que los propios estadounidenses (reflejado cuando un austriaco, el profesor Francen, recita ante el inspector de inmigración norteamericano las palabras escritas en el pedestal de la Estatua de la Libertad, cosa que ni el mismo inspector sabía), celebran el 4 de Julio de modo entusiasta. En una película que se loa el estilo de vida estadounidense, el American Way of Life, ese que sazona Emmy cuando habla de la felicidad reinante en el pequeño pueblo donde reside (diserta como "claro y fresco... nunca se estancará mientras fluyan nuevas corrientes", a lo que Georges en una respuesta atemporal que hoy día en la era Trump es tanto o más fresca que entonces, "Su gente está construyendo represas bastante altas para detener esas corrientes."); En este apartado de sub historia de la principal romántica, se hace un acercamiento buenista a estas gentes que esperan su oportunidad para entrar en la Tierra Prometida, todos ellas personas nobles, honestas y muy pro-USA, como el mencionado profesor. Gentes que sobreviven en una especie de Limbo a las puertas de su Esperanza, nombre irónico del hotel donde residen, unos supervivientes, como la embarazada Rosemary DeCamp que espera sus papeles lleguen antes del nacimiento, el barbero francés Bonbois (Curt Bois), que encuentra un probable vínculo hereditario “sagrado” (probable familiar del mítico aviador Roland Garros) para entrar en USA; Se loan las ganas sanas de entrar en USA, su paciencia ante las dificultades, su ingenio ante las vicisitudes, y se hace una crítica a la vil y deshumanizada burocracia, que pasa por encima de las necesidades de las personas; Pero esto se puede ver contradictorio en su mensaje, pues por un lado se nos habla de estas honradas figuras, pero por otro, como justificando este filtro insano administrativo de inmigración nos enseñan a dos personas que lo razonan, la buscavidas Ani, y su colega Georges, dos embaucadores; Como llamativo por demasiado aséptico no molestar el no hacer referencia del conflicto bélico en Europa, crucial para esta diáspora a USA, dejando un relato sesgado de la realidad, como lo es ver que son solo europeos empeñados en entrar en USA, no hay mexicanos deseosos de pasar la frontera. Y por cierto, es que entonces no operaban en la zona los llamados “Coyotes”? Guías ilegales que pasan a gente por grietas físicas en las fronteras. O porque esta gente era tan recta en sus acciones y no pasaban la frontera con la excusa de ir de turismo, les habría sido mucho más sencillo entrar en USA.

Aunque esto comentado es tangencial al núcleo de la historia, la relación entre un gigoló que se aprovecha de una ingenua maestra estadounidense, romance que empieza de modo chirriante y poco creíble, hay que darle mucha licencia dramática para creer que una profesora, que va de viaje con unos alumnos a pasar un día a México,...(sigo en spoiler)