Haz click aquí para copiar la URL
España España · almeria
Voto de TOM REGAN:
4
Acción. Drama Sam Childers es un exconvicto que, tras tocar fondo al matar a un hombre, se convierte en un devoto religioso que llega a colaborar en Ruanda, hasta el punto de construir allí con su dinero un refugio para niños. Su implicación personal es cada vez mayor, hasta el punto de llegar a defenderlo con las armas, sacrificar todo su patrimonio personal, desatender a su familia y perder a sus amigos al tiempo que combate como ... [+]
9 de abril de 2012
2 de 12 usuarios han encontrado esta crítica útil
78/06(07/04/12) El realizador de las buenas ‘Monster’s Balls’ y ‘Cometas en el cielo’, el alemán Marc Forster hace este engendro con pretensiones moralizantes basado en hechos reales. Lo peor de todo es que se la toma en serio y eso hace que no haya por donde cogerla. La historia de un tipo de Pensilvania recién salido de la cárcel, Sam Childers (inane Gerard Butler), un motero narcotraficante y consumidor, muy violento y amante de las armas, tiene una esposa, Lynn (inane Michel Monahan) y una hija, Paige (Madeline Carroll), tras tocar fondo se refugia en la fe cristiana y lo hace de modo fanático, monta una empresa de construcción con la suerte que al pasar un tornado por la zona se forra reconstruyendo casas, con el dinero crea su propia Iglesia y convirtiéndose en pastor de ella, al oír el sermón de un misionero que acaba de llegar del Sudán decide viajar al sitiio a ayudar a los niños necesitados, es una tierra asolado por una desgarradora guerra civil, los niños que también son reclutados como guerreros desalmados y como esclavos sexuales, una vez allí funda un orfanato, en USA deja a su familia, una vez establecido allí, para salvar el lugar y a los niños resuelve coger un fusil y lanzarse a ametrallar cual Rambo en una guerrilla a los enemigos. Pues todo esto es contado de modo chapucero, nada resulta creíble, nada te emociona, el ritmo narrativo brilla por su nulidad, los personajes son la apatía, es un relato de redención patético, el protagonista es un ser cruento antes de la supuesta conversión y lo es si cabe más después, se llevaba fatal con su familia antes de entrar en prisión y con su religiosidad se lleva fatal, menuda redención, se cree un cruzado blanco que va a salvar a disparos a los pobres negritos del África, menuda lección colonialista. Su desarrollo es tan plano como una mesa, la trama es demasiado redundante, la conversión de Sam es reflejada de forma lamentable, las escenas de acción son pésimas, y es que nada te llama la atención, si acaso sería saber que mente prodigiosa se le ocurrió que esto podría tener interés. Es un producto que busca conmover y los sentimientos que despierta van de la indignación a la frialdad, yo estoy en lo segundo, y es que te da igual lo que les pase a los que aparecen, esto es triste teniendo el tema tan delicado que tratan. ‘Hotel Ruanda’ y ‘Disparando a perros’ tratan temas parecidos inmensamente mejor. Fuerza y honor!!!
TOM REGAN
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow