Predecible, esa es la palabra para definir esta película; ya desde el primer momento se sabe lo que a continuación va a suceder (a lo mejor tengo poderes sobrenaturales), y a medida que sigue la película mas predecible y patética se hace.
Además en cuanto a la interpretación de los personajes, a Samuel L. Jackson no le pega para nada el papel que le han dado, un limpiador de escenas donde se han cometido crímenes el cual anteriormente había sido policía y que además es un padre muy preocupado por su hija esto último lo recalcamos, y despues tenemos a Eva Mendes que hace de madre coraje; sinceramente no me acuerdo de ninguna otra película en la que haya salido o bien por que era muy mala la película o bien por que decía dos frases sin sentido; que aburrido estoy de que hagan películas que dan asco y que a cambio pongan a chicas cachondas para atraer público.