Lo dicho, 3 horas (bueno, 179 minutos) de desmadre, culos, tetas y drogas con el aparente mensaje incrustado de que
la avaricia rompe el saco, que cuanto más engañas, robas y mientes (a gran escala) menos consecuencias tiene
penalmente y que todo vale para la consecución de los objetivos.
Como crítica salvaje a que estamos en manos de gamberros que NO PRODUCEN NADA, NO CREAN NADA e INCLUSO
NO ARRIESGAN NADA, es deprimente para el ciudadano de a pie que debe considerar que su vida es una mierda y que
querría ser como ellos. (Yo por supuesto no me considero tal y no les envidio nada, pero nada nada)
Eso sí, la dirección del desenfreno es lo suficientemente inteligente para mantenerte atento -yo creo que anticipando
ávidamente el ostión que se va a pegar el protagonista y que todos, egoístamente, anhelamos- y hacer que las 3 horas
no se hagan eternas. Lo que ocurre es que al final, acabas considerándolo una tomadura de pelo que se podría haber
contado en la mitad de tiempo (de hecho existen otras películas que lo hacen y sin tanto estruendo y chabacanería).
También te queda la sensación de que todo se ha mitificado y agrandado y estirado y sobredimensionado -sí, sí, ya sé: "en
ocasiones la realidad supera a la ficción"- y es imposible que un ser humano (o todos los seres humanos que aparecen entre
excesos en esta peli) haya pasado por todas estas vicisitudes y abusos y le hayan ocurrido tantos hechos improbables de
suceder.
Bueno, a mí me ha defraudado y sobre todo, ¿comedia...?, por favor...
Un saludo.
Di Angelo
spoiler:
Es imposible hacerlo de una película como esta, donde TODO está ya presentado desde el principio.