Una despedida de la serie Firefly que nunca tuvo un final debido a su absurda cancelación, y al mismo tiempo, una película diseñada para funcionar de forma independiente para un público que nunca la hubiera visto, ofreciendo acción, aventuras, gran ritmo, personajes con carisma y mucho entretenimiento.

Cuenta con todos los protagonistas pasado un tiempo, y añade grandes incorporaciones como Chiwetel Ejiofor, en parte vieja reunión de amigos y en parte el inicio en el cine de Joss Whedon, que busca soluciones creativas y rompedoras.

No desmerece la serie de la que proviene, lo que ya es decir mucho, y ofrece algo sencillo pero amable y bien hecho, lo que no es fan fácil de hacer en realidad.