El muñeco diabólico (2019) sabe adaptarse a los tiempos actuales homenajeando el cine de los años 80 de la misma forma que lo hacen muchas de las obras de hoy en día. Sin embargo, creo que en ningún momento se plantea siquiera el ser una película de terror, sino que va más enfocada a una comedia que, poco a poco, se va desinflando hasta que llega a un clímax final bastante desastroso. Chucky carece del icónico carisma que tanto caracterizaba al Muñeco diabólico original.