Un film oscuro y ambiguo, que refleja muy toda una época la de la dictadura militar argentina de principios de los ochenta. El banquero suizo, que tras la misteriosa desaparición de su socio en extrañas circunstancias, con la ayuda de su mujer se dedica a hacer negocios con militares, grandes magnates y hasta con la iglesia católica, a la que representa un siniestro sacerdote. Todo un microcosmos de, oportunistas, gentes sin escrúpulos, pero eso sí, muy refinados y cosmopolitas, también en unas pocas pinceladas se refleja, el miedo, la represión y los primeros desaparecidos, todo contado con mucha pausa y naturalidad y sin estridencias.