En cuarentena estoy pagando grandes deudas que tenía con el cine clásico, ojalá todas las deudas fueran así, de entrada no sabía mucho sobre la película, solo que actuaba el gran Peter O'Toole, que era dirigida por el gran David Lean y que había ganado varios oscar, Todo lo anterior es importante, pero en concepto integral de lo grande que es Lawrence de Arabia es pequeño. De fondo tenemos a David Lean con una filmografía enorme, a mi me gustan casi todas, las que rodaba al principio en plan intimista, tipo 'Breve encuentro' y 'Grandes esperanzas' a obras legendarias como 'Doctor Zhivago', 'La hija de Ryan', 'El puente sobre el río Kwai' y 'Lawrence de Arabia'. Pocos directores han tenido su sentido del espectáculo y su profundidad. David Lean es uno de los grandes de la historia del cine , puede que injustamente lo estemos olvidando pero su trabajo es inmortal. Lawrence es un cine magnético y obsesivo, brillante en el desarrollo de su personaje, un personaje pasional y único, con ideologías por las cuales está dispuesto a morir o enloquecer, en todo caso casi no hay diferencia. En ese viaje mítico a una Arabia siendo invadida por Turquía se une a la perversa y ambiciosa ansia de conquista de Inglaterra y Francia, todo esto en medio de plena revolución industrial que cambio para siempre el poder militar de cada país. Esto es solo el contexto, migas o líneas secundarias que son importantes para darle validez al tema central del filme. Este es el desarrollo del alma atormentada del gran personaje central, que se ve invadido no solo por la violencia natural de los desiertos y vida salvaje de los Árabes y sus conflictos, si no que choca sobre la naturaleza irracional y violento de los humanos, En esto los ojos del gran Peter O'Toole logran transmitir perfectamente ese descenso y ascenso hacia el hastío y la incredulidad, pocas veces una secuencia de inicio y cierre en un filme tuvieron tanta congruencia. Algunos otros aditivos para hacer de la experiencia más emocionante es el elenco de secundarios, que van desde el carismático Omar Sharif hasta el impecable Anthony Quinn, que trío actoral por Alá. La banda sonora de Maurice Jarre es magistral y sintoniza en perfeccion con ese trabajo de fotografía impecable de Freddie Young que no se puede dejar de apreciar. Pocas veces he visto un trabajo visual que refleje ese lado natural y salvaje del Desierto, es algo completamente vivencial y sentido, aquellos planos generales del personaje, la arena y el cielo son de las imágenes más bellas de la historia del cine. Cintón y medio, y me quedo corto, es cierto que su metraje es un tanto exagerado pero he disfrutado tanto la experiencia que ni siquiera note que pase casi 4 horas al frente de mi televisor. Obra Maestra Absoluta