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Voto de Hilodeseda:
4
4.7
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Aventuras. Drama
Judah Ben-Hur (Jack Huston) es un príncipe falsamente acusado de traición por su hermano adoptivo Messala (Toby Kebbell), un oficial del ejército romano. Desposeído de su título y separado de su familia y de la mujer que ama (Nazanin Boniadi), Judah es condenado a la esclavitud en las galeras. Después de varios años, Judah regresa a su tierra natal en busca de venganza, pero encontrará su propia redención. (FILMAFFINITY)
14 de septiembre de 2016
1 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Hace un par de viernes llegó a nuestras pantallas el archifamoso –por innecesario y vapuleado– nuevo remake de Ben-Hur, película que adapta la ya de por sí popular obra literaria de ficción del político, militar y escritor norteamericano Lewis (Lew) Wallace (1827-1905), Ben-Hur: A tale of the Christ (1880).
La película, creada bajo un único prisma económico, no aguanta –como era de esperar– ni una sola comparación con aquella magistral y mastodóntica obra del 1959 realizada por William Wyler, ganadora de 11 Oscars de la Academia y protagonizada por Charlton Heston, Stephen Boyd, Jack Hawkins, Hugh Griffith y la inolvidable banda sonora de Miklós Rózsa; película que a su vez ya constituía para sorpresa de muchos un remake, ya que la novela de Lew Wallace ya se había adaptado con anterioridad –ilegalmente sin consentimiento de los herederos de Wallace– en un breve cortometraje mudo en 1907 y posteriormente en el largometraje también de cine mudo que Fred Niblo dirigió en 1925, con el protagonismo del primer actor mexicano en triunfar en los Hollywood: Ramón Novarro.
La flagrante falta de originalidad e ideas en el universo cinematográfico -principalmente norteamericano- conlleva una serie de tomas de decisión realmente beligerantes contra la memoria idealizada del universo cinematográfico y cinéfilo, sin duda un atentado que en mi persona ni siquiera levantó una mínima expectación hacia su resultado final, ni siquiera por herejía (el aspecto de Morgan Freeman con rastas ciertamente no ayudaba lo más mínimo).
Finalmente y por gajes del oficio terminé por autoconvencerme de la conveniencia de ver esta versión dirigida por el realizador kazajo de nacionalidad rusa Timur Bekmambetov, cuyo escaso bagaje incluye la dirección de films tan anodinos en el libreto pero con un único objetivo de entretenimiento como 'Guardianes de la noche', 'Guardianes del día', 'Wanted' (su debut en USA) y la divertida por irrisoria 'Abraham Lincoln, cazador de vampiros' (film que confirma su unión en la producción con Tim Burton); conveniencia derivada de la pasión profesada a la versión del 1959 y que no haría sino aumentar más -si es posible- la leyenda de un film inigualable, película que se realizó en una época de apogeo del cine religioso y conservador (presidencia del republicano y ex general del ejército americano Dwight Eissenhower –1953/1961–) en aras de la unión de la nación americana tras la II Guerra Mundial en contra de los 'peligros' que llegaban desde la Unión Soviética en plena Guerra Fría.
'Ben Hur (2016)' busca mostrar un film épico e icónico en torno a sus dos momentos clave más recordados: toda la parte de las galeras en el barco romano y la popular carrera de cuadrigas. Es decir, el film ha sido concebido para explotar dichas dos secuencias gracias a los avances que las tecnologías han ido aportando a la industria cinematográfica con el paso de los años, algo que potencia varios instantes o secuencias pero que van en detrimento de otros grandes puntos fuertes de la novela original. Así pues nos encontramos con una historia menos desarrollada al reducir el metraje para ello cercenando así personajes y secuencias que formaban parte y daban consistencia a una todo más sólido, presentar un desarrollo efímero o inexistentes de los mismos, mutilar grandes diálogos y, en definitiva, sacrificar la coherencia narrativa y el tono epopéyico de la obra de Niblo o Wyler.
Entrando en la representación de dichos dos secuencias, es verdad que son espectaculares y, a pesar de no haberlas visto en 3d, resultan satisfactorias (además de ciertas modificaciones interesantes) sobre todo para las generaciones más jóvenes, más acostumbradas a este tipo de tecnologías, pero...Traten de evitar compararlas con las de 1959. Absténganse de ello, porque sino...¿Qué prefieren unas escenas espectaculares pero en esencia con ese tono irreal que desprende el cine digital o una de las secuencias magistrales de la historia del cine rodada en los estudios Cinecittà de Roma?
(sigue en spoilers)
La película, creada bajo un único prisma económico, no aguanta –como era de esperar– ni una sola comparación con aquella magistral y mastodóntica obra del 1959 realizada por William Wyler, ganadora de 11 Oscars de la Academia y protagonizada por Charlton Heston, Stephen Boyd, Jack Hawkins, Hugh Griffith y la inolvidable banda sonora de Miklós Rózsa; película que a su vez ya constituía para sorpresa de muchos un remake, ya que la novela de Lew Wallace ya se había adaptado con anterioridad –ilegalmente sin consentimiento de los herederos de Wallace– en un breve cortometraje mudo en 1907 y posteriormente en el largometraje también de cine mudo que Fred Niblo dirigió en 1925, con el protagonismo del primer actor mexicano en triunfar en los Hollywood: Ramón Novarro.
La flagrante falta de originalidad e ideas en el universo cinematográfico -principalmente norteamericano- conlleva una serie de tomas de decisión realmente beligerantes contra la memoria idealizada del universo cinematográfico y cinéfilo, sin duda un atentado que en mi persona ni siquiera levantó una mínima expectación hacia su resultado final, ni siquiera por herejía (el aspecto de Morgan Freeman con rastas ciertamente no ayudaba lo más mínimo).
Finalmente y por gajes del oficio terminé por autoconvencerme de la conveniencia de ver esta versión dirigida por el realizador kazajo de nacionalidad rusa Timur Bekmambetov, cuyo escaso bagaje incluye la dirección de films tan anodinos en el libreto pero con un único objetivo de entretenimiento como 'Guardianes de la noche', 'Guardianes del día', 'Wanted' (su debut en USA) y la divertida por irrisoria 'Abraham Lincoln, cazador de vampiros' (film que confirma su unión en la producción con Tim Burton); conveniencia derivada de la pasión profesada a la versión del 1959 y que no haría sino aumentar más -si es posible- la leyenda de un film inigualable, película que se realizó en una época de apogeo del cine religioso y conservador (presidencia del republicano y ex general del ejército americano Dwight Eissenhower –1953/1961–) en aras de la unión de la nación americana tras la II Guerra Mundial en contra de los 'peligros' que llegaban desde la Unión Soviética en plena Guerra Fría.
'Ben Hur (2016)' busca mostrar un film épico e icónico en torno a sus dos momentos clave más recordados: toda la parte de las galeras en el barco romano y la popular carrera de cuadrigas. Es decir, el film ha sido concebido para explotar dichas dos secuencias gracias a los avances que las tecnologías han ido aportando a la industria cinematográfica con el paso de los años, algo que potencia varios instantes o secuencias pero que van en detrimento de otros grandes puntos fuertes de la novela original. Así pues nos encontramos con una historia menos desarrollada al reducir el metraje para ello cercenando así personajes y secuencias que formaban parte y daban consistencia a una todo más sólido, presentar un desarrollo efímero o inexistentes de los mismos, mutilar grandes diálogos y, en definitiva, sacrificar la coherencia narrativa y el tono epopéyico de la obra de Niblo o Wyler.
Entrando en la representación de dichos dos secuencias, es verdad que son espectaculares y, a pesar de no haberlas visto en 3d, resultan satisfactorias (además de ciertas modificaciones interesantes) sobre todo para las generaciones más jóvenes, más acostumbradas a este tipo de tecnologías, pero...Traten de evitar compararlas con las de 1959. Absténganse de ello, porque sino...¿Qué prefieren unas escenas espectaculares pero en esencia con ese tono irreal que desprende el cine digital o una de las secuencias magistrales de la historia del cine rodada en los estudios Cinecittà de Roma?
(sigue en spoilers)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
La respuesta parece sencilla pero por si se plantean alguna duda les dejaré unos datos: Para el rodaje de esa inolvidable carrera de cuadrigas se eligió a Andrew Marton y Yakima Canutt, dos directores que solían trabajar como directores de segunda unidad en otras películas, y que contaban además con sus propios ayudantes de dirección (uno de ellos resultaba ser el director de Spaguetti Westerns Sergio Leone). Que para recrear la arena del circo se inspiraron en un circo romano de Jerusalén y que para crearlo construyeron en dichos estudios Cinecittà el mayor set/plató de rodaje que se había creado nunca ocupando la friolera de 73.000 metros cuadrados y con un coste de producción de 1 millón de dólares de la época. Que por ejemplo, tallar el óvalo en la cantera donde se construyó el circo costó a los trabajadores más de un año de trabajos en una pista con una dimensiones finales de 460 metros de largo en las rectas y 5 pisos de altura en las tribunas. Otros datos como las figuras de 9 metros de se levantaban en la espina central de la arena, la utilización de elementos históricos como el contador de vueltas en forma de pez, la utilización de 79 caballos y 20 cuidadores, la instrucción de un joven de 18 en la herrería dado la falta de un herrero profesional en la zona, las semanas de aprendizaje de Stephen Boyd (Mesala) en la conducción de cuadrigas –a Charlton Heston le costó poco tiempo dada su destreza como jinete–, la construcción de 18 carros romanos de 410 kilos cada uno, la construcción de una enfermería con 20 camas y enfermeros dada la peligrosidad de la escena, la contratación de 7.000 extras, la utilización de dinamita o la cantidad de leyendas urbanas que giran entorno a tan mítica escena (parece ser que se pueden apreciar ciertas marcas de ruedas del vehículo que filmaba al lado de las cuadrigas en ciertas secuencias finales y que no fueron eliminadas del montaje final). Datos que no hacen sino poner de relevancia el CINE, con mayúsculas que se hacía aquellos años.
La película no obstante no resulta tan horrorosa como podría parecer. A pesar de que los actores utilizados no tiene el carisma necesario (dichos actores consiguieron su popularidad gracias a la televisión aunque ambos, tanto Jack Huston –Ben Hur– como Tobbey Kebell –Mesala–, no realizan ni mucho menos su debut en la gran pantalla), de lo falso de varias secuencias (sí, también lo falso de las rastas de Morgan Freeman como el jeque Ilderim), de lo flojo de los diálogos y del guion en general (muestra un Jesucristo más tangible y cercano, interpretado por el actor brasileño Rodrigo Santoro), se hace suficientemente distraída y se aprecian trabajos de posproducción interesantes como para resaltarlos. La banda sonora de Marco Beltrami resulta francamente efectiva aunque muy lejos evidentemente de la partitura de Rózsa.
Sin duda 'Ben Hur 2016' es un fallida recuperación de un clásico, que no está obteniendo los resultados económicos esperados -de hecho está siendo de los mayores fracasos en taquilla del año-, y que esperemos -al menos- haga borrar de la mente de los productores USA la idea de recuperar los grandes clásicos de la Historia del Cine.
Lo mejor: La reducción del metraje. Huston en sus escenas de jinete. Rememorar la escena de las cuadrigas.
Lo peor: Los diálogos y ciertos personajes esperpénticos como Pilatos (Pilou Asbaek) o el romano que compite con Mesala. Las rastas de Freeman. Lo falso que se aprecia todo en ciertos momentos. La idea de traerla de nuevo de vuelta.
VALORACIÓN:
Fotografía: 5
Banda sonora: 5,5
Interpretación: 4
Guión: 3
Dirección: 3
Satisfacción: 4
NOTA FINAL: 4,1
@hilodeseda - www.habladecine.com
La película no obstante no resulta tan horrorosa como podría parecer. A pesar de que los actores utilizados no tiene el carisma necesario (dichos actores consiguieron su popularidad gracias a la televisión aunque ambos, tanto Jack Huston –Ben Hur– como Tobbey Kebell –Mesala–, no realizan ni mucho menos su debut en la gran pantalla), de lo falso de varias secuencias (sí, también lo falso de las rastas de Morgan Freeman como el jeque Ilderim), de lo flojo de los diálogos y del guion en general (muestra un Jesucristo más tangible y cercano, interpretado por el actor brasileño Rodrigo Santoro), se hace suficientemente distraída y se aprecian trabajos de posproducción interesantes como para resaltarlos. La banda sonora de Marco Beltrami resulta francamente efectiva aunque muy lejos evidentemente de la partitura de Rózsa.
Sin duda 'Ben Hur 2016' es un fallida recuperación de un clásico, que no está obteniendo los resultados económicos esperados -de hecho está siendo de los mayores fracasos en taquilla del año-, y que esperemos -al menos- haga borrar de la mente de los productores USA la idea de recuperar los grandes clásicos de la Historia del Cine.
Lo mejor: La reducción del metraje. Huston en sus escenas de jinete. Rememorar la escena de las cuadrigas.
Lo peor: Los diálogos y ciertos personajes esperpénticos como Pilatos (Pilou Asbaek) o el romano que compite con Mesala. Las rastas de Freeman. Lo falso que se aprecia todo en ciertos momentos. La idea de traerla de nuevo de vuelta.
VALORACIÓN:
Fotografía: 5
Banda sonora: 5,5
Interpretación: 4
Guión: 3
Dirección: 3
Satisfacción: 4
NOTA FINAL: 4,1
@hilodeseda - www.habladecine.com