Teniendo en cuenta que la primera era un entretenimiento de auténtica calidad y la segunda un truño en el que el director no pudo ocultar sus aires pretenciosos, este tercera resulta una notable mejoría aunque tiene sus flaquezas (a veces el argumento es innecesariamente complicado para lo que nos quiere contar).

Está claro que la pareja Clooney – Pitt funciona a la perfección, y la inclusión de Ellen Barkin y Al Pacino ha sido bastante acertada. Estos cuatro actores se roban la película y le quitan el protagonismo al resto del reparto incluyendo a Matt Damon que por una vez lo veo bastante soso y prescindible.

En cuanto al guión, ahora es mucho más descabellado pero al mismo tiempo ingenioso y recuerda bastante a la primera en sus mejores momentos, a veces se le va mucho la mano en los métodos que usa la pandilla para atracar el casino.

Y ya no es necesario que hagan un “Ocean’s 14” a menos que quieran estropear la saga.